El Supremo de Brasil autoriza iniciar una investigación contra Bolsonaro
El Gobierno de Jair Bolsonaro se tambalea tras el despido de dos de sus ministros. Primero fue el Luiz Henrique Mandetta, que ocupaba la cartera de Sanidad y no apoyaba los planes de Bolsonaro para tratar la crisis sanitaria; y más recientemente ha sido Sergio Moro quien ha decidido renunciar a su cargo como ministro de Justicia.
Moro goza de cierta fama por ser el juez que aprisionó a Lula da Silva y ahora por tener fuertes desencuentros con Bolsonaro. El antiguo juez explicó que dejaba su cargo por las presiones del mandatario para cambiar al jefe de la Policía Federal y sus intentos de interferir en investigaciones que salpican a sus hijos.
Estas acusaciones dejan muy mal parado a Bolsonaro que basó parte de su campaña en los casos de corrupción atribuidos a Lula da Silva.
El juez decano del máximo tribunal ha dado 60 días para llevar a cabo la investigación policial solicitada por el fiscal general del Estado tras las palabras de Moro. Con estas acusaciones en primera línea, Bolsonaro igualmente colocó a un amigo de sus hijos al frente de la Policía Federal.
El fiscal general, Augusto Aras, sospecha que el mandatario pudo haber cometido varios delitos, incluidos coacción, prevaricación, obstrucción de la justicia y corrupción pasiva. Tras culminar la investigación, la fiscalía debe decidir si inicia un juicio. Además de esto, sobre la cabeza de Bolsonaro pesan varias peticiones de juicio político (impeachment), aunque el presidente de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, no ha autorizado a los diputados discutir algunas de ellas. @mundiario
