Sánchez volverá a conversar con los partidos para evitar unas nuevas elecciones
El líder del PSOE pide al PP, Ciudadanos y Podemos a restablecer el diálogo tras no lograr la investidura en el Congreso de los Diputados. La intención del actual presidente en funciones es evitar unas nuevas elecciones generales el próximo 10 de noviembre.
Pedro Sánchez quiere restablecer el diálogo con los principales partidos tras no lograr la investidura en el Congreso de los Diputados. El presidente en funciones anunció –en una entrevista en Tele5– que volverá a negociar con el Partido Popular, Ciudadanos y Unidas Podemos para evitar la realización de unas nuevas elecciones generales el próximo 10 de noviembre en España.
“No hay que tirar la toalla”, ha afirmado el líder socialista. El inquilino de la Moncloa dijo que tiene voluntad de “volver al punto de inicio” y “explorar otros caminos”. “Hay motivos”, ha añadido, “para buscar acuerdos entre PP, Ciudadanos y Podemos”. Fuentes al interior del PSOE le señalaron a El País que la estrategia del presidente en funciones será de nuevo intentar convencer a esos grupos de que se abstengan para facilitar su Gobierno.
En las dos sesiones de investidura, Sánchez tuvo un resultado estrepitoso producto de que las negociaciones con los demás partidos no llegaron a buen puerto. El pasado lunes, el presidente en funciones solo logró sumar el único diputado del Partido Regionalista de Cantabria (PRC) a los 123 socialistas, frente a 155 votos en contra y 67 abstenciones. Los votos negativos fueron del PP, Ciudadanos, Vox, Junts per Catalunya, Coalición Canaria y Navarra Suma, y las abstenciones de Podemos, ERC, PNV, EH Bildu y Compromís. La misma foto se repitió ayer.
En la última sesión de investidura, Sánchez aprovechó para cargar contra Pablo Iglesias, a quien acusó de bloquear su ratificación como jefe del Ejecutivo por no ceder en sus pretensiones de que Unidas Podemos tenga más puestos claves en el Gobierno. “¿Por qué no ha sido posible el acuerdo? Conciliar dos culturas y dos tradiciones siempre supe que era muy difícil, pero propuse el acuerdo a cambio de un programa. Pronto advertí que el programa nunca fue el problema”, enfatizó.
Sea como fuese el asunto, Sánchez tiene como plazo hasta el próximo 23 de septiembre para formar Gobierno. La tarea resulta complicada cuando se observa un bloqueo político persistente de la derecha (PP, Cs y Vox) e increíblemente del que debería ser su socio político, Unidas Podemos. Si todo sigue igual, las urnas esperarán a los españoles el 10 de noviembre. @mundiario
