Sánchez descarta la opción de la independencia pero deja abierta la puerta al indulto

Pedro Sánchez. / Mundiario
Pedro Sánchez. / Mundiario

Su intención, según dice, es gobernar en solitario con acuerdos con los demás grupos. "Tenderé la mano a todos los partidos, singularmente al PP, Ciudadanos y Podemos", afirma en una entrevista. De entrada, se ofrece a la izquierda como el único partido que puede frenar a la derecha.

Sánchez descarta la opción de la independencia pero deja abierta la puerta al indulto

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se niega a cerrar la puerta de posibles indultos a los presos del llamado procés, como le reclaman con insistencia tanto Ciudadanos como el PP. Sánchez carga contra los independentistas y descarta la opción de la independencia de Cataluña, pero deja abierta la puerta al indulto.

"No puedo decir que no a los indultos porque, al contrario que ellos [los líderes del PP y Ciudadanos] soy el presidente del Gobierno. Y tengo que respetar la independencia judicial. Primero llegará la sentencia y después decidirá el poder político. Ahora es el momento de los jueces", explica el candidato socialista en las elecciones del 28-A.

La intención de Pedro Sánchez, según dice, es gobernar en solitario con acuerdos con todos los demás grupos. "Tenderé la mano a todos los partidos, singularmente al PP, Ciudadanos y Unidas Podemos", afirmó en una entrevista en La Sexta. 

"La mal llamada policía patriótica se acabó el día que llegamos nosotros al Gobierno", asegura el presidente del Gobierno, pero Pablo Iglesias, líder de Podemos y el principal aliado del Ejecutivo de Sánchez, se queja de que algunos miembros de esa policía patriótica siguen en sus puestos.

"Es cierto, hubo policías corruptos que fueron utilizados para obstaculizar procesos judiciales y para espiar a adversarios. Yo me solidarizo con Pablo Iglesias. No se puede caer más bajo. Y le digo que van a pagar las consecuencias. No les podemos expulsar de la policía mientras no haya una sentencia firme, pero hemos apartado a todos. Vamos a llegar hasta el final", promete Pedro Sánchez.

Entre tanto, Pablo Casado, líder del  PP, se enredó con el salario mínimo y rectificó tras apuntar a que lo bajaría a 850 euros en 2020. El PP emplaza a una nueva negociación con los sindicatos después de decir que respetaría el acuerdo de Mariano Rajoy, que preveía una subida menor a los 900 euros aprobados por el Ejecutivo de Pedro Sánchez. @mundiario

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