¿Por qué la crisis entre Marruecos y España no ha terminado?

Frontera entre Marruecos y España. / RR SS
Frontera entre Marruecos y España. / RR SS

El cruce de palabras entre ministros y las consecuencias de la avalancha humana en la frontera sigue causando resquemor entre ambos gobiernos

¿Por qué la crisis entre Marruecos y España no ha terminado?

Se pudiera resumir que la estadía del líder Polisario Brahim Gali, en España, no solo ha sido el detonante de la crisis política y diplomática entre España y Marruecos, sino que además la todavía permanencia del subshariano causa molestia al gobierno marroquí que no recibe de España respuestas convincentes.

Y cuando ya han pasado semanas de la llamada “invasión” de Ceuta de parte de decenas de inmigrantes a territorio español, las consecuencias de este suceso continúan desatando desencuentros entre Marruecos y España.

En primera instancia están las declaraciones de parte y parte, las más recientes, las del primer ministro marroquí, Saadedín Ozmani, quien, en representación de varios ministros reunidos, declaró que: "España se deja llevar por la voluntad de crear problemas, de frustrar los esfuerzos de Marruecos para consagrar su integridad territorial y de intentar presionar a Rabat”.

"Los participantes consideraron que las posiciones de España, que atentan contra la causa nacional que supone un consenso entre todos los marroquíes, han socavado la confianza y el respeto mutuos".

Lo que sí han dejado claro desde Marruecos, es que la causa de la crisis, ha sido por la acogida al jefe Polisario, Brahim Gali, lo que demuestra que hubo complacencia al permitir que salieran miles de inmigrantes de manera desordenada.

Marruecos considera que España ha hecho intentos por “desviar el debate”, y reconocen que el motivo de la crisis es el ingreso de Ghali "con documentos falsificados y una identidad usurpada", pese a estar requerido por los tribunales.

En España hubo también pronunciamientos de parte de Carmen Calvo, Vicepresidenta primera de Gobierno. “Queremos respetar a Marruecos, pero lo que ha ocurrido no puede ocurrir. Es un asalto que no podemos consentir”.

Calvo ha acusado a Marruecos de saltarse "un límite de la buena vecindad" al haber permitido un "asalto" a las fronteras españoles en la ciudad autónoma de Ceuta.

La vicepresidenta se refirió además a Brahim Gali, que es la causa de la discusión con Marruecos: "Somos un Gobierno que respetamos la independencia del Poder Judicial, no nos adelantamos. No sabemos qué tienen que decir, pero sí que tiene que comparecer", en referencia a que el jefe Polisario deberá presentarse ante la justicia el 1 de junio.

Las devoluciones

La devolución de inmigrantes desde Ceuta “en caliente” ha sido otra consecuencia de la crispación entre ambos países. Este caso viene a raíz de la denuncia de una ONG quienes señalaron que se han abierto diligencias para analizar las actuaciones de las autoridades españolas, cuando rechazaron en la frontera a menores llegados a nado a la playa del Tarajal.

Esta ONG pone ejemplos de jóvenes que quisieron ingresar a Ceuta nadando y flotando sobre botellas de plástico y aun así fueron devueltos de manera inmediata.

Las denuncias abrieron el debate sobre si el Gobierno central había o no realizado devoluciones en caliente para que muchos de ellos volviesen al país vecino, pero el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, negó que así fuese, sin embargo, la Fiscalía ha abierto una investigación para dilucidar si realmente fueron estas devoluciones 'en caliente'. @mundiario

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