Joe Biden se enfrenta a dos epidemias en los Estados Unidos

La Casa Blanca. / Mundiario
La Casa Blanca. / Mundiario

El presidente ha prometido que para fines de julio de este año, habrá suficientes vacunas contra la COVID-19 para 300 millones de norteamericanos.

Joe Biden se enfrenta a dos epidemias en los Estados Unidos

El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, entró en acción, sin perder un segundo, el mismo día en que ocupó su cargo, el 20 de enero de 2021. Como dicen en inglés, Biden hit the ground running, o sea, tocó tierra corriendo, una frase cuyo origen muchos atribuyen a la orden que recibían los paracaidistas en la Segunda Guerra Mundial: empezar a combatir en cuanto pusieran los pies en el suelo.

Las órdenes de Biden

Ese día, Biden firmó 17 órdenes ejecutivas para revertir muchas medidas tomadas por su antecesor en la Oficina Oval, Donald Trump. Entre esos decretos están:

> La orden de usar mascarillas y mantener el distanciamiento social en edificios públicos, con el fin de evitar el contagio de la Covid-19.

> Regresar al Acuerdo de París, después que Trump irresponsablemente sacó a los Estados Unidos de ese convenio mundial contra el cambio climático.

> Mantener a los Estados Unidos en la Organización Mundial de la Salud (OMS), revirtiendo la decisión de Trump de abandonar esa entidad internacional. El doctor Anthony Fauci, el principal especialista en enfermedades infecciosas de los Estados Unidos, está al frente de la delegación norteamericana a la OMS.

> Biden también anuló la prohibición de entrada a los Estados Unidos de personas de siete países de mayoría musulmana, ordenada por Trump en los inicios de su mandato.

> En materia de inmigración, Biden también envió al Congreso un proyecto de ley para ofrecer un camino a la ciudadanía estadounidense a 11 millones de inmigrantes indocumentados. Ordenó mantener el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que protege de la deportación a los Soñadores, los inmigrantes traídos cuando eran niños a los Estados Unidos por sus padres. Y detuvo la construcción del muro en la frontera con México, que se había convertido en un emblema infame del gobierno de Trump.


Quizá también te interesa

Joe Biden tiene un plan para sacar a 12 millones de estadounidenses de la pobreza


Biden, en efecto, tocó tierra corriendo. Su mayor prioridad es detener la epidemia del coronavirus, que se ha ensañado en los Estados Unidos porque Trump nunca trazó un plan nacional contra la amenaza, no tenía ningún plan de vacunación e incluso trató de minimizar el peligro de la enfermedad. En el momento de escribir este artículo, la cantidad de muertes por la COVID-19 en los Estados Unidos se acerca al medio millón, y la proporción de decesos es de 1.485 por millón de habitantes, una de las más elevadas del mundo. Biden planea detener el avance devastador de la pandemia con el uso obligatorio de mascarillas, el distanciamiento social y un eficaz plan de vacunación. Ha prometido que para fines de julio habrá suficientes vacunas para 300 millones de estadounidenses.

La otra epidemia que Biden planea combatir es la del prejuicio y el racismo sistémico. Firmó una orden ejecutiva que prohíbe la discriminación por orientación sexual en los empleos del gobierno federal, y eliminó la prohibición contra las personas transgénero de servir en las fuerzas armadas.

Racismo y xenofobia

En sus cuatro años de gobierno, Trump fomentó el racismo y la xenofobia con sus medidas contra la inmigración y su respaldo mal disimulado al supremacismo blanco. Más de 70 millones votaron por Trump en las elecciones de noviembre de 2020, lo que demuestra que –aunque Biden ganó por amplia mayoría– las ideas retrógradas del ex presidente tienen un eco potente en un sector numeroso de la sociedad norteamericana. Muchos de los que votaron por Trump creen que la elección les fue robada, y ven al ex mandatario como un caudillo que estaba decidido a detener la conversión de los Estados Unidos en una nación más plural, con una mayor diversidad étnica en la cual el grupo blanco no hispano será otra minoría más.

Trump fracasó, pero sus ideas supremacistas se mantienen flotando en el convulso ambiente nacional. Biden debe encontrar una “vacuna” moral e ideológica contra la plaga del racismo.

Puedes leer mi libro más reciente, Trump, ¡estás despedido!, publicado por Mundiediciones. @mundiario

Comentarios