El PP da muestras de nerviosismo ante una posible victoria de Pedro Sánchez

Mariano Rajoy. / RR SS
Mariano Rajoy. / RR SS

El Ejecutivo ha reconocido incluso que un triunfo del madirleño en las primarias del PSOE haría que la actual legislatura fuera más corta de lo esperado.

El PP da muestras de nerviosismo ante una posible victoria de Pedro Sánchez

Políticos los hay muy pocos como Pedro Sánchez. Es decir, políticos que con sólo mover un dedo son capaces de agitar los océanos donde navegala clase política de un país. La presentación de avales en Ferraz el último jueves ya dejó intimidado al entorno de Susana Díaz, que no descarta que Sánchez se lleve por delante a la andaluza en las elecciones. Pero su espectro va más alla. Su conocida hambre voraz ha hecho que hasta el equipo de Mariano Rajoy empiece a cuestionarse seriamente qué futuro le espera a su Gobierno si el madrileño regresa a la secretaría general del PSOE. Según cita eldiario.es a sus fuentes, el presidente "está más preocupado por la debilidad de los socialistas y su futuro incierto que por el follón que va a montar Podemos con la moción de censura, que como hemos visto se vuelve contra el que lo monta".

La Moncloa da por hecho de que un ascenso al poder de Sánchez cerraría de forma intrínseca cualquier posibilidad de llegar a cualquier acuerdo con los socialistas y comprometería este periodo de sesiones en las Cortes. "Si gana, la legislatura va a ser cortísima", dice otra fuente interna del PP al mismo diario.

La cantidad de firmas presentadas el jueves por el madrileño dejó cuando menos con la boca abierta al PP. La sorpresa empañó una mañana en la que había logrado sacar adelante el primer paso para aprobar los Presupuestos Generales del Estado de 2017.

Génova insiste en que sea el PSOE el principal aliado para los grandes pactos del Estado. El rol de los socialistas en la investidura de Mariano Rajoy -la abstención, esa que llevó a Sánchez a armar una guerra civil en el partido-, más el apoyo a proyectos como la fijación del techo de gasto y el objetivo de déficit, han ayudado al Ejecutivo a brindar una imagen de relativa estabilidad en la Unión Europea.

"Hay debates tan importantes como la unidad territorial de España, la creación de empleo, la estrategia internacional frente al yihadismo o el pacto por la educación o las pensiones en los que necesitamos un partido de izquierdas moderado que precisamente se diferencie de otros", dijo Pablo Casado, vicesecretario de Comunicación de los conservadores.

Esta imagen es uno de los grandes ejes de los celestes. Andrea Levy, vicesecretaria de Estudios y Programas del Partido Popular, explicó por su parte que "Podemos quiere generar situaciones de inestabilidad en las que espero y deseo que no le acompañe el PSOE, porque en el juego del caos siempre va a ganar Podemos, pero los españoles tienen que ganar con la estabilidad”.

Pese a que Sánchez ya dejó claro que no participará ni apoyará la moción de censura promovida por Unidos Podems, también ha dicho que "la salida de Rajoy es la puerta de la Moncloa". El madrileño ha dejado la puerta abierta a una moción de censura "constructiva tejiendo esas alianzas".

El nerviosismo es tal que uno de los altos mandos populares, Javier Maroto, vicesecretario de Política Social y Sectorial del PP, zanjó las dudas respecto a quién es la consentida de los suyos: Susana Díaz. "A Susana Díaz no se le oye decir una cosa y la contraria sistemáticamente. Trata de defender la socialdemocracia como ellos la conciben, es una idea distinta de lo que representamos pero se le entiende, al menos, la idea que defiende"

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