La popularidad de Emmanuel Macron se desploma hasta su nivel más bajo
La aceptación del joven mandatario entre los franceses registra sus peores números desde que asumiera la presidencia.
La popularidad de Emmanuel Macron sigue desplomándose a toda velocidad. El presidente de Francia acaricia sus peores cifras desde que asumiera el poder hace casi 9 meses y una encuesta reciente ha revelado que el 53 % de los ciudadanos franceses asegura haber perdido la confianza en el líder del partido En Marche!.
El panorama continúa oscureciéndose para el inquilino del Palacio del Elíseo. El sondeo, desarrollado por la empresa Odoxa, expone solo el 43% de los franceses considera que Macron es un “buen presidente de la República”. Las mencionadas cifras indican que el jefe del Estado ha retrocedido 14 puntos desde el pasado mes de diciembre, lo cual da cuenta de una caída vertiginosa.
Sin embargo, el análisis deja claro que el descontento de los franceses no solo recae sobre el jefe de Estado. En ese sentido, el barómetro mensual muestra que existe, además, un rechazo masivo al primer ministro de Francia, Edouard Philippe. El representante perdió 7 puntos en febrero, lo cual se traduce en una pérdida acumulada de 11 puntos desde que terminó el año.
Emmanuel Macron, presidente de Francia. / Courrier des Afriques
Entre las razones que han ayudado a enterrar la popularidad de Macron en la nación figuran sus polémicas y cuestionadas medidas. Por ejemplo, los ciudadanos señalan el anuncio del límite de velocidad a 80 km/h en algunas carreteras departamentales y la eliminación de algunas líneas de ferrocarriles, además de la reforma de la Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF), empresa fundamental para la vida de millones de franceses, que hoy se encuentra sumida en una deuda millonaria y en la degradación de su infraestructura, y para la cual el presidente ha ideado un plan que no ha recibido el visto bueno de los sindicatos.
El estudio concluye adelantado que la impopularidad de Emmanuel Macron puede aumentar en las próximas semanas como resultado de una fase de tensiones sociales con los sindicatos, la izquierda y los sectores populares. Así, el líder francés se hace grande en Europa, donde, según los analistas, incluso podría llegar a convertirse en el jefe de una Unión Europea moderna y abierta. Mientras, en casa las cosas continúan complicándose. @mundiario
