El PDeCAT titubea y pide que se retrase la declaración de independencia
La coordinadora general y el conseller de Empresa han pedido a Carles Puigdemont que centre los esfuerzos del corto plazo en arreglar las cosas con el Ejecutivo central.
El PDeCAT ha llamado a la cordura a su máximo líder, Carles Puigdemont, y ha propuesto que detenga la declaración de independencia que pretende emitir este mismo lunes. Marta Pascal y Santi Vila, coordinadora general del partido y conseller de Empresa, respectivamente, han manifestado este viernes que a día de hoy la prioridad debe ser la mediación entre la Generalitat y el Gobierno central, por lo que han llamado a Puigdemont a frenar esta proclamación, aunque sin renunciar a ella del todo.
"El 1-O nos vincula, pero hay que hacer las cosas bien", explicó Pascal en declaraciones hechas a la cadena Ser. Sus palabras se interpretan como un llamado a la cordura, consciente de que la estampida al precipicio que ha tomado Puigdemont podría arrastrar serias consecuencias para el proyecto en general.
La coordinadora no quiere que "la fotografía que salga" de la Cámara catalana sea igual a la imagen de división que dejó ésta tras la aprobación de la ley del referéndum. Pascal ha clamado porque "no se disuelva la complicidad" entre los independentistas y la ciudadanía que quedó herida e indignada por las cargas policiales que sufrieron el domingo. "Tenemos que intentar no perder ni expulsar a nadie", aseguró.
La dirigente del partido neoconvergente ha hecho énfasis en que los suyos quieren "garantizar que la independencia sea efectivo", algo que, no obstante, no ha querido unir a la polémica declaración del lunes. Debido a ello, Pascal, en armonía con el conseller Vila, ha situado la mediación entre Barcelona y Madrid como la prioridad para los próximos días, asegurando que el Govern está más que dispuesto a sentarse a negociar con los representantes de La Moncloa, aunque también dejó ver su molestia con el PP, que se ha negado a todo tipo de diálogo bilateral en esta materia.
Vila, por su parte, ha comparecido ante los micrófonos de la Rac-1, y sus palabras secundaron las de Pascal. "El referéndum nos obliga, pero tenemos que reflexionar sobre si las prisas pueden estropear el sueño", aseguró el funcionario, quien el jueves había publicado un artículo en el diario Ara con la misma aseveración. Vila, quien en pleno terremoto no se ha despegado ni un centímetro del presidente, se aleja de esta forma del sector más radical del partid y el Govern en general.
"Primero tenemos que serenarnos y acordar, si se me permite, un alto al fuego, no tomar decisiones irreparables en los próximos días. La suspensión de la autonomía o las detenciones tensionarían al país y polarizarían la situación. Hay que serenarse, firmar una especia de tregua que nos permita un movimiento de serenidad, de moderación", aseguró.
Lo cierto es que en Barcelona la declaración de independencia ha sumado todavía más a la crisis vivida tras el referendo ilegal del domingo. El Parlament tenía programado un pleno para el lunes en el que se esperaba que Puigdemont diera cuentas sobre la consulta dominical. No obstante, el Tribunal Constitucional suspendió el pleno en cuestión puesto que el mismo fue llamado en base al artículo 4.4 de la ley del referendo, suspendida por la misma instancia. Los independentistas respondieron al fuego de inmediado y, aprovechando el reglamento de la Cámara, volvieron a convocar al pleno. La maniobra dejó sin nada qué hacer a los magistrados del Constitucional y los partidos independentistas, como el PP, se han resignado a que tendrán que participar del cónclave. Así, salvo algún cambio de opinión de último minuto, el lunes Puigdemont pasará a declarar a independencia de Cataluña.
