Otegui hizo lo mismo que otros antes: poner precio al apoyo a Sánchez

No se entiende que se haya desencadenado tal polémica por las declaraciones de Arnaldo Otegui poniendo precio o contravalor a su apoyo a los presupuestos generales del Estado de Sánchez. ¿Es que es lo mismo que otros como el PNV o Esquerra Republicana de Cataluña no hicieron lo mismo y lo manifestaron y recordaron repetidamente, si no era diligente al presidente del Gobierno Pedro Sánchez? Claro que el precio de Otegui es especialmente repugnante, ¿pero lo era menos el del PNV con respecto al traspaso de las prisiones y acercamiento de etarras? Cierto que en este caso el primer asunto –uno de los más graves errores de los pactos de la “transición—era una de las transferencias pendientes que ningún presidente anterior, incluidos González o Zapatero, se atrevieron a ejecutar. Otegui no ha hecho nada nuevo. Simplemente se ha manejado con seguridad.
¿Hemos olvidado que Pedro Sánchez dijera, desde la tribuna del Congreso de los Diputados que sus principios vetaban que jamás se planteara llegar a la presidencia del Gobierno con el apoyo de los independentistas? ¿Hemos olvidado los pactos entre el PSOE y Bildu en Navarra o que la ex ministra Carmen Calvo dijera que todo acuerdo con Bildu era una línea roja intraspasable y añadiera “y los socialistas somos de fiar”? El mismo Otegui se cansó de decir en actos públicos que el apoyo a Sánchez formaba parte de la estrategia en orden a alcanzar los objetivos de su partido. O sea, que pedir la libertad de los 200 penados de ETA que siguen en la cárcel era perfectamente lógico dentro de este contexto.
Otegui se atuvo a un guion perfectamente lógico: primero lamentar las víctimas causadas por acción criminal de ETA, pero cuidándose de condenar la propia existencia del movimiento terrorista; luego, poner sobre la mesa el precio por apoyar los presupuestos, a modo de algo más que una sonda. Conviene fijarse en las dos secuencias de las palabras de Otegui: "Tenemos 200 presos y tienen que salir de la cárcel. Si para eso hay que votar los Presupuestos, los votaremos sin ningún problema. Así de alto y claro lo decimos. Y lo haremos muy tranquilos". Siete horas antes dijera sentir "pesar y dolor por el sufrimiento padecido por las víctimas”, de ETA. “Nunca debió haberse producido". Fin del mensaje.
324 razones para no fiarse de ETA
Hay 324 razones, sobre 829, para no fiarse de ETA. Son los 324 asesinatos, contabilizados por Dignidad y Justicia que quedan sin resolver del macabro historial de esta organización criminal. Ni aun los arrepentidos dispuestos a colaborar han ayudado a que se sepa quiénes fueron los autores de aquella escabechina de tiros en la nuca, bombas lapa o bombas por correo. Y el hecho de que todos o gran parte de estos crímenes queden técnicamente impunes porque el paso del tiempo impuso la extinción de responsabilidades penales, siguen vigentes las morales. Y eso sin contar los numerosos daños y estragos igualmente no castigados.
Cabe recordar el caso secuestro y desaparición de tres jóvenes gallegos José Humberto Fouz, Jorge Juan García y Fernando Quiroga, que habían acudido, en 1973, a ver la película 'El último tango en París' a San Juan de Luz. ETA los confundió con policías, los secuestró, los torturó, los asesinó y se deshizo de los cadáveres de tal forma que jamás han sido encontrados. Pese a los llamamientos institucionales de todo tipo para que la banda colabore con la localización de los cuerpos, siempre ha guardado silencio sobre este caso. Pero en la cuesta de ETA hay otros casos que, como el asesinato en Tolosa de tres jóvenes que vendían enciclopedias en euskera a los que tomó por policías disfrazados.
Y en cuanto a los 324 crímenes sin resolver, Bildu no dice nada. Al menos, sería un gesto de verdadero arrepentimiento que dijeran la verdad; pero según código de la banda, los límites de su colaboración con la justicia son “la delación y el arrepentimiento”, como repetidamente pregonaban los dirigentes más duros de esta organización y sus afines. Los medios de apoyo a ETA, han aprovechado las palabras de Otegui y las reacciones a las mismas, para reorientar el tiro hacia otro plano: los propios excesos del Estado en la persecución a ETA y la existencia del GAL y sus crímenes, asunto éste que con otros llevó a la cárcel en su momento a la cúpula del Ministerio del Interior, con Barrionuevo y Vera, de la etapa de Felipe González, sin que nunca supiéramos quien era “mixter X”
El viento favorable a Bildu
A Bildu-ETA. de momento, el viento les es favorable, dado la transferencia de las prisiones y el régimen carcelario por parte de Sánchez a sus consocios del PNV, dentro del paquete de sus acuerdos, al tiempo que el progresivo acercamiento de presos que acabarán en las prisiones vascas, de modo que, como el propio PNV ha manifestado, se tratará de lograr su reintegración a la sociedad mediante una política penitenciara que los vaya dejando en la calle poco a poco.
Declaración institucional del Parlamento Vasco contra ETA. / Mundiario
Se vuelve a insistir que el único camino para que los presos de ETA que siguen en las cárceles del Estado sea la llamada “Vía Nanclares”. Cabe recordar que esta vía la abre Mariano Rajoy, para rehabilitar a los etarras arrepentidos. La cárcel alavesa de Nanclares fue elegida, ya por el PSOE para agrupar a presos de ETA que decidieron desvincularse de la lucha armada, pidieran perdón por sus crímenes y se comprometieron a pagar la responsabilidad civil a sus víctimas, cosa esta última que nunca se ha realizado, por su propia insolvencia. Esta vía les permitia obtener el tercer grado (para salir durante el día de la cárcel y tener permisos de fin de semana). Con esta benévola medida, los etarras pueden, al cumplir tres cuartas partes de la condena y contar con un pronóstico de reinserción favorable, obtener la libertad condicional.
Bien es cierto, y debe destacarse, como positivo, que estos días siete de los ex miembros de ETA acogidos a la vía Nanclares, entre los que figuran exdirigentes como Joseba Urrusolo Sistiaga y Carmen Gisasola, se hayan mostrado críticos con la gestión que la banda y los dirigentes de la izquierda abertzale han realizado del final de la violencia. Frente a lo que dice Otegui, han considerado inaceptable que los dirigentes del Bildu no hayan asumido aún la responsabilidad política por el daño causado por ETA. Para ellos es insuficiente la ahora conocida como “Declaración del Dieciocho de Octubre” que leyeron Arnaldo Otegi y Arkaitz Rodríguez.
No deja de ser curioso que, al tiempo que se ha emplazado a Sánchez a que cumpla sus compromisos, el presidente del PNV, Adoni Ortuzar, había advertido a Sánchez que se cuidara de ponerse en las manos de Bildu, entre otras cosas porque teme que el blanqueo de ETA dé alas a este partido para crecer a costa precisamente de su electorado y ante el apoyo de Podemos a Bildu, Ortuzar dijo hace unos mesesque Pedro Sánchez debería "dar un puñetazo en la mesa del Consejo de Ministros" porque "así no se puede continuar", con respecto a los apoyos de Podemos a los objetivos de Bildu que pretende coger impulso en Madrid para iniciar en el País Vasco el asalto a la hegemonía peneuvista, comenzando primero por las Juntas Generales. No se debe olvidar que, pese a la negativa de Sánchez a atender la petición de Otegui, no se han roto las negociaciones con Bildu sobre los presupuestos. Bildu ha lamentado los efectos, pero sigue sin condenar a ETA, como quedó de manifiesto al no apoyar la declaración institucional que suscribieron todos los demás grupos representados en la cámara vasca al cumplirse diez años del fin de la actividad criminal de este grupo.
Hoy mismo, Podemos, partido en el Gobierno, junto con el PNV, EH Bildu, ERC y JpCat han encabezado la marcha a favor de los presos de ETA por las calles de San Sebastián con la que se pretende que todos los presos de la banda sean acercados a las tres prisiones del País Vasco, pero es sólo una pantalla: Se sabe que en manos del PNV controlando las prisiones, irán saliendo poco a poco. Pero el objetivo final es claramente otro, que esos 180 presos y no 200 como dice Otegui, sean puestos en la calle de uno u otro modo por un cambio de la politica penitenciara del Gobierno central. @mundiario