¿Vamos a recuperar las niñas de Nigeria solo desde las redes sociales?

Boko Haram, el líder de la secta radical nigeriana, exige intercambiar a las jóvenes por milicianos presos y afirma en un vídeo que las colegialas secuestradas fueron convertidas al islam.

El pasado 14 de abril,  Boko Haram —organización terrorista de carácter fundamentalista islámico de Nigeria, y cuya traducción sería "La pretenciosidad es anatema", aunque también traducido como "La enseñanza occidental es pecado"— secuestró a más de 200 niñas en Nigeria. Unas 50 de ellas lograron escapar y han podido contar que eran violadas ¡hasta quince veces al día! y eran amenazadas con ser degolladas si no se convertían al islam. El propio líder de secta-terrorista ha asegurado que serán vendidas en el mercado de trata de personas. No es un hecho aislado. Ya han asesinado a miles de personas.

Desde las redes sociales, fundamentalmente Twitter, ha comenzado la campaña #BringBackOurGirls (Devolvednos a nuestras niñas), exigiendo la devolución de las niñas. Han sido muchas las personalidades que, cartel en mano, piden su liberación. Desde la BBC hasta Michelle Obama, pasando por Malala Yousafzai, Naciones Unidas, Amnistía Internacional... Casi todos se han solidarizado con la causa. Y por supuesto, también en terreno patrio. Políticos, periodistas, deportistas, cantantes... Todos se han sumado a la campaña. También ha tomado relevancia la campaña de la Fundación DNA "Real men don't buy girls" (Los hombres de verdad no compran niñas) que lleva luchando desde 2010 contra la trata de personas.

Y... ¿ya está? ¿Eso es todo lo que vamos a hacer? ¿Nos creemos que con unos mensajes en las redes sociales los secuestradores van a enternecerse? Es inútil. Una patochada. ¿Se puede exigir a un escorpión que no pique? ¿Pues como pretende convencer a los terroristas si ellos nos consideran enemigos? No creo que sea una estrategia para localizarlos al oír sus carcajadas. Es como si la Organización Mundial de la Salud lanzara una campaña bajo el lema: "Mosquitos, no piquéis pues nos podéis contagiar el paludismo". Es absolutamente ridículo. Puedo estar equivocado, pero si en lugar de niñas fueran dólares, estoy convencido de que ya estarían en casa.

Piensen. Sean buenos.