La oposición en Venezuela acusa a Maduro de fraguar un golpe de Estado

Julio Borges (centro) comparece frente a la Asamblea Nacional este jueves 30 de marzo. / Twitter
Julio Borges (centro) comparece frente a la Asamblea Nacional este jueves 30 de marzo. / Twitter

La anulación de los poderes de la Asamblea Nacional ha llevado a los líderes opositores a exigir al Ejército a que reaccione ante el quiebre del orden constitucional.

La oposición en Venezuela acusa a Maduro de fraguar un golpe de Estado

Venezuela se convirtió desde la noche del pasado miércoles en el primero o uno de los pocos países del mundo que no tienen Organismo Legislativo. Un fallo del Tribunal Supremo de Justicia -uno de los tantos refugios de las huestes chavistas- despojó de sus poderes a la Asamblea Nacional (AN), que a su vez es controlada por la oposición desde hace más de un años. La decisión desató la ira de los líderes opositores, quienes acusaron a Nicolás Maduro de dar un golpe de Estado por medio del tribunal. "Es un golpe de Estado, y quiero que el mundo nos ayude y los medios nos ayuden a decirlo con todas sus letras: en Venezuela Nicolás Maduro dio un golpe de Estado", explicó Julio Borges, presidente del organismo. Borges tildó de "basura" el histórico dictamen del tribunal y cargó contra los magistrados del mismo, quienes fueron elegidos "para gobernar fuera de la Constitución". A las quejas se unió Henrique Capriles, gobernador del Estado de Miranda y otrora competidor electoral de Maduro.

En la noche del 29 de marzo, el TSJ dictaminó que anulaba y prácticamente clausuraba a la Asamblea Nacional por "desacato", de acuerdo a una determinación del mismo tribunal tras no haber cumplido varias sanciones impuestas. Así, será el mismo tribunal el que se encargue de las competencias y poderes que tenía hasta entonces el Parlamento a fin de mantener el "Estado de derecho". Aparte de eso, los magistrados dieron nuevas potestades a Nicolás Maduro en materia penal, militar, económica, social, política y civil, según rezaba su fallo, algo que fue celebrado por el mismo heredero de Hugo Chávez. "Me están facultando con un poder habilitante especial para defender la institucionalidad, la paz, la unión nacional y rechazar amenazas de agresión o intervencionismos contra nuestro país. Esta es una sentencia histórica", presumió el jefe de Estado.

Los remanentes del Parlamento clamaron al Ejército para rebelarse ante esta evidente "ruptura" constitucional impulsada por los despachos del Ejecutivo bolivariano. "La Fuerza Armada venezolana no puede seguir callada frente a la ruptura de la Constitución. Sabemos que la inmensa mayoría de los oficiales (...) están en contra del caos que sucede en Venezuela", clamó Borges.

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