La Oficina de Inmigración y Aduanas inicia redadas y detiene a 121 centroamericanos
La ICE ha arrancado una serie de redadas en EE UU que los candidatos demócratas rechazan. La propia Hillary Clinton las ha calificado de inapropiadas e inhumanas.
El primer fin de semana de enero de 2016, la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE por su sigla en inglés), arrancó una serie de redadas en EE UU con el fin de arrestar a los ciudadanos que figuren como prioritarios de deportación: aquellos considerados una amenaza a la seguridad nacional (terroristas, personas involucradas en espionaje, criminales, entre otros). Diferentes medios estadounidenses publican que ha habido denuncias de que las redadas han tenido como blanco a personas sin este tipo de antecedentes, como por ejemplo inmigrantes que entraron a Estados Unidos después del 1 de enero de 2014, que no tienen causa de asilo y/o recibieron una orden final de deportación.
Al respecto de estas redadas, los candidatos demócratas Bernie Sanders, Martin O’Malley y Hillary Clinton siempre se han mostrado en contra. La propia Hillary declaraba esta semana: “Tenemos leyes y debemos guiarnos por esas leyes, pero no deberíamos permitir que agentes federales armados aparezcan en las casas de las personas, sacando a mujeres y niños de sus camas a media noche”.
Clinton aboga por aplicar la ley de inmigración pero de manera "apropiada y humana". Considera que las redadas actuales no cumplen con ninguno de los dos adjetivos.
Hasta el momento en las redadas que la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) inició el primer fin de semana de enero, se han detenido a 121 inmigrantes —principalmente procedentes de Guatemala, El Salvador y Honduras— en Carolina del Norte, Georgia y Texas.
