El niño sirio ahogado es el tema de la mejor caricatura política inglesa del año
La Ellwood Atfield Gallery, de Londres, con el apoyo de varios patrocinadores, realiza, mediante votación popular en una página web, la selección de la mejor caricatura política del año.
Una imagen horrible, una imagen de la vergüenza, una imagen insoportable: un niño sirio de tres años ahogado en aguas turcas tratando de llegar con su familia a la isla griega de Kos, huyendo de la guerra que asola a su país.
Se llamaba Aylan Kurdi. Su foto fue un grito de alerta al mundo, pero lo peor es que siguen muriendo niños en ese intento de cruzar el mar, y los miles de refugiados son rechazados en Europa.
El dibujante Peter Brookes, del periódico inglés The Times, transformó esa historia en un mensaje crítico al mostrarnos cómo llega tarde un salvavidas europeo a la orilla de la playa donde yace el niño ahogado.
Su obra ha ganado, por votación popular en una página web, entre una propuesta de 28, como mejor caricatura política del año 2015 en Gran Bretaña. A la ceremonia de premiación, organizada por la Ellwood Atfield Gallery, de Londres, y con el apoyo de varios patrocinadores, asistieron cientos de caricaturistas, personalidades de la cultura y políticos, en un acto que ratifica el valor de la caricatura, su denuncia social y su incidencia en el pensamiento de la sociedad.
El segundo lugar lo obtuvo Bob Moran del Daily Telegraph con un dibujo titulado “Labour is not working”, donde muestra una larga cola de desempleados donde aparecen ex líderes del Partido Laborista.
La selección de la mejor caricatura del año es una iniciativa que muy bien pudiera llevarse a cabo en España, como un estímulo a la labor de los humoristas gráficos, muy afectados por el despido de miles de ellos, de los medios en que laboraban en este país, y donde cada día es más difícil ganarse la vida con ese trabajo.
