El Mundial de Rusia 2018 o el arma de Putin para mejorar su imagen

Vladimir Putin, presidente de Rusia. RR SS.
Vladimir Putin, presidente de Rusia. / RR SS.

Ha comenzado uno de los eventos más esperados del año donde se reúnen gran cantidad de países para celebrar en una competencia futbolera que logra superar los problemas entre las fronteras, culturas o religiones. Allí solo importa el fútbol y el país anfitrión tiene una gran oportunidad por delante.

El Mundial de Rusia 2018 o el arma de Putin para mejorar su imagen

Tras crisis políticas, envenenamiento a espías, caza de periodistas, intervenciones en elecciones presidenciales y violaciones de derechos humanos, en Rusia se está celebrando el Mundial de Fútbol. ¿Qué pasa? todo lo anterior ha quedado relegado ante uno de los eventos deportivos más importantes del mundo donde se reúnen cada cuatro año las selecciones representantes de distintos países del mundo. Cualquier conflicto político, cultura, religión o frontera queda atrás para dar paso al evento capaz de unir países que estén en conflicto y de darle a la nación que hace de anfitriona un gran impulso ante el mundo. Esto lo sabe Vladimir Putin, quien no dudará en utilizar el evento para mejorar su imagen ante los ojos del mundo luego los continuos escándalos que persiguen a Moscú.

El propio Putin expresó que no es fanático del deporte, pero eso no ha evitado que se haya esforzado por brindar lo mejor de lo mejor a sus invitados y demostrar que Rusia es una potencia capaz de albergar un evento de tal magnitud. La apuesta rusa no es nueva, saben cómo preparar este tipo de actos mundiales para dejar perplejos a sus invitados internacionales, en nuestra memoria prevalece esa increíble apertura de los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi en 2014, donde los rusos impactaron demostrando lo mejor de su historia y cultura.

La apertura del Mundial de Rusia 2018 no ha sido distinta, llena de color, emoción y estrellas tanto internacionales como rusas, el presidente Putin ha vuelto a dejar claro que Moscú no se corta a la hora de invertir en los eventos que reúnen a otros países. El openning del evento corrió a cargo del cantante Robbie William, un cantante inglés, que puede interpretarse como un pequeño guiño para Reino Unido, una nación con la que Rusia está actualmente en conflicto por el envenenamiento de un exespía y su hija.

Las continuas injerencias de Rusia ha hecho que su imagen quede a la deriva a nivel internacional, llevando a que sus diplomáticos sean expulsados de distintas naciones y que muchos de sus aliados se aparten. Algunos pensarán o dirán que el Mundial no debería celebrarse en un país cuya imagen esté tan deteriorada, pero lo cierto es que el fútbol es un tema que deslumbra tanto a dirigentes deportivos como a políticos, se ha visto manchado por corrupción y hablamos del evento definitivo del deporte, es casi imposible cancelarlo.

 

Las repercusiones económicas que tiene son monumentales y lo cierto, es que todo morimos por ver jugar a nuestras selecciones y saborear la posibilidad de ganar la Copa. Los futbolistas se convierten en leyendas y héroes; y el país anfitrión no solo gana económicamente, también queda muy bien ante sus pares.

Aquí amamos el fútbol. Rusia es un país abierto, hospitalario y amigable”, dijo el presidente ruso en su discurso de apertura. Y es que empezó muy bien con el aplaudido concierto y posterior victoria 5-0 a favor de Rusia en el partido que disputó contra Arabia Saudita.

 

Desde la disputa con Crimea, Rusia ha quedado muy mal parada a nivel internacional, enfrentado distintas sanciones que la han dejado aislada de otras naciones. Con el Mundial, el gobierno de Putin se ha encargado de recibir con los brazos abiertos a los fanáticos y equipos de fútbol, pero también a los diplomáticos que acuden para apoyar a los seleccionados.

Pero Rusia debe tener cuidado, porque si bien las personas andan encantadas con el brillo del país como la sede temporal del Mundial, esto no quiere decir que los principales dirigentes de Occidente hayan olvidado. Esto quedó evidenciado en la inauguración, a la cual no asistieron los líderes de Francia, Reino Unido o Alemania. Tal vez al final, Putin sea uno de los ganadores del Mundial, pero deberá ser cuidadoso para lavar su imagen porque interferir en elecciones, apoyar al régimen sirio o envenenar a exespías no es algo que se olvida fácilmente. @mundiario

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