Los conservadores pierden otro candidato para el Constitucional tras la negativa de Marchena
El redactor de la sentencia del procés se niega a abandonar la Sala Penal del Supremo. Ante su negativa, el órgano de los jueces del gobierno continúa su búsqueda para ocupar una plaza.
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) continúa en la búsqueda de dos magistrados que quieran ocupar un puesto en el Tribunal Constitucional. El gran problema es que parece que nadie quiere ocupar un puesto y poco a poco se han indo quedando sin candidatos.
El sector más conservador del CGPJ abogaba por nombrar a Manuel Marchena, presidente de la Sala Penal del Tribunal Supremo, pero este ha declinado la oferta. Conocido por ser el redactor de la sentencia del procés, su perfil está bien visto en el sector progresista.
Dentro del Consejo parece haber una mayoría sólida de vocales que aprueban efectuar los nombramientos del Constitucional para no afectar la reforma legal que impulsó el Gobierno que a su vez busca desbloquearlos. Sin embargo, desde el sector más conservador planean no estar implicados en el movimiento e incluso buscarían retrasarlo hasta que encuentren candidatos favorables.
Los conservadores insistirían en Marchena debido a que sería un personaje fuerte ante una mayoría progresista que previsiblemente llegará al Constitucional. Pese a esto, el presidente de la Sala Penal del Supremo se ha mostrado inamovible en su decisión, la cual dificulta que la renovación pueda hacerse con una amplia mayoría dentro del Consejo General del Poder Judicial.
Desde junio, cuatro de las 12 plazas del Tribunal Constitucional están pendientes de renovación. En concreto, son las dos que le corresponden al Gobierno y las dos del CGPJ. De ocurrir la renovación, el Constitucional pasará de tener una mayoría de magistrados conservadores a una mayoría progresista. Para poder acelerar el proceso, el PSOE anunció en junio una proposición de ley que devolvía al Poder Judicial la capacidad de realizar los nombramientos aun estando en funciones, mientras, en junio introdujo más presión al introducir una enmienda parlamentaria a través de la cual imponía la Consejo que esos nombramientos ocurrieran antes del 13 de septiembre, tal como detalla El País.
Ahora, la renovación del Constitucional dependerá de que los bandos de los progresistas y los conservadores logren convencer a sus candidatos para cubrir las dos plazas. Del lado conservador han encontrado dificultades debido a que los candidatos con los que ha contactado, solo han dado negativas a sus solicitudes, entre ellos el mencionado Marchena o Antonio del Moral.
La renovación del Tribunal dejará una mayoría progresista de siete a cinco o quizás de siete a cuatro, pero siempre dejando a los conservadores con la minoría. Con esta probabilidad, los candidatos a convertirse en presidente del Constitucional serían el magistrado Cándido Conde-Pumpido, exfiscal general del Estado, o la catedrática de Derecho Constitucional, María Luisa Balaguer. @mundiario
