Lavrov advierte a Estados Unidos sobre Siria en una acalorada discusión con Tillerson en Moscú

Lavrov y Tillerson se han reunido en Moscú para discutir la situación siria. / RRSS
Lavrov y Tillerson se han reunido en Moscú para discutir la situación siria. / RRSS

El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, comenzó la reunión con su homólogo estadounidense, Rex Tillerson, con una advertencia: no vuelvan a atacar al régimen sirio. Luego del ataque químico en ese país la relación de los antiguos enemigos vuelve a la baja.  

Lavrov advierte a Estados Unidos sobre Siria en una acalorada discusión con Tillerson en Moscú

El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, se ha reunido sin dilaciones con su homólogo estadounidense en Moscú. La consigna de los rusos ha sido sencilla: no vuelvan a atacar a Siria. 

Los dos países han negociado los pormenores del ataque químico de la semana pasada, que causó la muerte de 89 personas, y que llevó a Estados Unidos a realizar su primer ataque contra el régimen sirio en seis años de conflicto, destruyendo aviones e infraestructura en una base aérea militar siria.

La Casa Blanca acusó a Rusia y Siria de llevar a cabo una campaña de confusión sobre quién fue el responsable del ataque químico. El presidente ruso Vladimir Putin ha hecho comparaciones entre la respuesta de Estados Unidos y su intervención de 2003 en Irak, calificándola de una historia "tediosa". Las cantidad de muertes ha sido ampliamente atribuida al régimen del presidente sirio Bachar El Asad, pero Rusia, el aliado más poderoso de Siria, ha negado que el régimen haya llevado a cabo el ataque.

Lavrov dijo el miércoles que Rusia "vio algunas acciones muy preocupantes con respecto al ataque a Siria".
"Creemos que es fundamental no dejar que estas acciones vuelvan a ocurrir". También se quejó de los mensajes mezclados que salían de Washington sobre la política del gobierno de Trump sobre Siria, como los que lanzara la embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, dejando claro que Asad no tendría futuro en Siria, mientras que Rex Tillerson, el más alto representante de la diplomacia estadounidense, manifestaba una postura más suave. Algo que ha cambiado reiteradamente.

"Seré franco que hemos tenido un montón de preguntas acerca de un montón de ideas muy ambiguas, así como contradictorias sobre toda la agenda bilateral e internacional que viene de Washington", dijo Lavrov.

Lavrov también respondió a los comentarios que Tillerson hizo un día antes de la reunión, aquellos en los que advertía que Rusia tendría que decidir si estaba con Estados Unidos, o estaba con El Asad, comentarios que describió como "elecciones equivocadas". Tillerson por su parte, tomó un tono más diplomático en sus palabras de apertura, diciendo que esperaba aclarar "áreas de objetivos comunes, áreas de intereses comunes, incluso cuando nuestros enfoques tácticos pueden ser diferentes".

El secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, dijo que si bien la derrota de ISIS era la primera prioridad, el uso de armas químicas por el régimen de Asad no sería tolerado, y podría justificar una acción militar adicional. "Si usan armas químicas, van a pagar un precio muy alto", dijo Mattis a periodistas durante la primera sesión informativa del Pentágono como secretario.

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