La ONU enviará una misión a Chile para buscar una salida a la crisis social
Las Naciones Unidas ha puesto el foco de su atención en la crisis social de Chile. La alta comisionada para los derechos humanos de dicha entidad, Michelle Bachelet, aceptó una invitación del presidente Sebastián Piñera para constatar la magnitud de las masivas protestas que se realizan en Santiago desde la semana pasada.
“Tras monitorear la crisis desde el comienzo, he decidido enviar una misión de verificación para examinar las denuncias de violaciones a los Derechos Humanos en Chile. Parlamentarios y el Gobierno han expresado su interés en recibir una misión de @UNHumanRights", ha escrito Bachelet en su cuenta de Twitter.
La exmandataria chilena volverá a realizar la misma labor de constatar si en Santiago se están cometiendo abusos contra los protestantes. En junio pasado, Bachelet viajó a Venezuela para constatar la dimensión de la crisis humanitaria provocada por el líder chavista Nicolás Maduro. A fines de julio, la un informe final verificó que, efectivamente, el régimen venezolano registró 5.287 muertes en el 2018 por "resistencia a la autoridad". Mientras que sólo entre el 1° de enero y el 19 de mayo de este año 1.569 personas fueron asesinadas.
Bachelet ya había mostrado su preocupación el lunes por la situación en su país, del que fue presidenta durante dos mandatos no consecutivos, y había apelado al diálogo. En esa línea, la política chilena defendió que “es esencial que todos los actos que han provocado lesiones y muerte, tanto por parte de las autoridades como de los manifestantes, sean sometidas a investigaciones independientes, imparciales y transparentes”.
La alta comisionada de las Naciones Unidas también condenó las acusaciones de “uso excesivo de la fuerza por parte de algunos miembros de las fuerzas de seguridad y del Ejército”, así como que “a algunos detenidos se les habría denegado el acceso a abogados, tal y como es su derecho, y que otros han sido maltratados en detención”.
Desde el viernes pasado, la Administración de Piñera declaró el estado de emergencia en Chile y desplegó incluso al Ejército a raíz de las violentas protestas desatadas inicialmente por la subida del precio del metro. Desde entonces se ha confirmado al menos 18 fallecidos, principalmente en incendios durante saqueos, aunque también algunos a manos de las fuerzas de seguridad.
El presidente Piñera anunció la noche del martes una serie de medidas para acabar con las protestas. Entre los que destacan son el aumento del salario mínimo, la reducción de los sueldos a los parlamentarios y funcionarios públicos, así como limitar la reelección para el Congreso. Sin embargo, hasta el momento, el estallido social en Chile parece que no acabará. @mundiario
