Kahhat: "Los inmigrantes y las minorías étnicas son los enemigos de la derecha populista"

El populismo se ha convertido en el arma perfecta de los políticos en el mundo para ganar elecciones y tomar decisiones controversiales en sus Administraciones. En el 2016, este fenómeno volvió a tener su vigencia con el magnate Donald Trump, quien, contra todo pronóstico, venció a la demócrata Hillary Clinton en las elecciones de EE UU. Dos años después, Jair Bolsonaro irrumpió en la política brasileña en medio del desprestigio que provocó el caso Lava Jato. Y por estas semanas, Boris Johnson quiere apelar a ese populismo de sus homólogos norteamericano y brasileño. Al respecto, conversamos con el analista Farid Kahhat (Lima, 1959), quien, además, presenta su nuevo libro El eterno retorno (Planeta, 2019), donde ensaya algunas reflexiones sobre este fenómeno.

- A la derecha radical se le asocia con el autoritarismo y el populismo, pero usted agrega en su libro un nuevo concepto: el nativismo. ¿De qué trata?

- El término “nativismo” lo tomó del investigador Cas Mudde, quien hizo una de las definiciones más aceptables dentro de la literatura académica sobre la derecha populista radical. El “nativismo” es un alias del nacionalismo étnico. Básicamente, todos los grupos de derecha radical reivindican alguna variante de nacionalismo étnico. Este efecto no se relaciona en función a la pertenecía a una nación, sino por la cultura de origen. Entonces, este nacionalismo étnico está asociado a combatir a los enemigos internos, desde la perspectiva de los nativistas.

- ¿Cómo influye en la derecha populista radical el rechazo a las elites?

- Cuando uno habla de elites, nos referimos a las elites políticas y económicas. Ahí podemos mencionar los casos de Silvio Berlusconi en Italia o Donald Trump en EE UU. En el caso Berlusconi, quien fue dueño de uno de los conglomerados más importantes de Italia y luego fue jefe de Gobierno, y también se aplicó con Trump, nos preguntamos: ¿Cómo estos políticos pueden criticar a esas elites si de allí salieron? Respecto a Trump, antes de asumir la presidencia de EE UU, era un multimillonario y se movía dentro de ese mundo. Por eso cuando emitió sus mensajes de campaña en el 2016, dijo que sabía cómo eran las elites, porque venía de ahí. Entonces se aplica la crítica sobre que se perteneció a esas elites y, por eso, se tiene una actitud cierta paternalista con las demandas del pueblo.

- ¿La demanda y la oferta ayudan a que la derecha populista pueda tener más apoyos?

- Si bien este fenómeno se presenta en periodos de crisis económicas, que previamente fueron precedidas por grandes recesiones como la vivida en el 2007 en Europa, según los análisis de los académicos, pasado los cinco años de esos periodos, estos fenómenos tienden a decrecer en su influencia política. El discurso de la derecha populista radical le dice a su base electoral que podrían volver a retroceder si continúa el crecimiento de la inmigración, las minorías étnicas que pueden competir por puestos de trabajo y transferencias del Estado.

- ¿La inmigración y el racismo también forman parte del auge de la derecha radical?

- En el libro mencionó que el grupo excluido siempre se presenta como algo ajeno a la sociedad. Por eso no es inusual que se apuntan como enemigos externos a los chinos y mexicanos, como ha sido en la era Trump. Los chinos quieren competir deslealmente con la industria norteamericana, los mexicanos quieren desplazar a los trabajadores de EE UU y los musulmanes compiten deslealmente por el trabajo y son una amenaza para su seguridad. La gente de esos orígenes se convierte en potentes enemigos.

- ¿Cómo impactan estos factores de la derecha populista en países como EE UU y el Reino Unido?

- EE UU y el Reino Unido están entre los países de la OCDE que tienen más desigualdad, según el coeficiente Gini. ¿Qué relación tienen el malestar político y la desigualdad? La desigualdad está muy asociada al peso de las elites económicas y su poder de decisión en el ámbito político. También hay un componente en la definición de la agenda legislativa y las decisiones del Ejecutivo. Por eso, los legisladores y los gobernantes toman decisiones muy favorables a los intereses de la elite y no del pueblo.

- ¿Donald Trump puso en vigencia el fenómeno de derecha populista radical?

- En el caso de Trump hay elementos de oportunismo político y de convicción. Como lo dice el investigador Thomas Wright, Trump no tenía experiencia, pero siempre tuvo declaraciones públicas sobre temas polémicos en los Estados Unidos por más de treinta años: los regímenes autoritarios, el proteccionismo comercial y su oposición al multiretalismo, que apunta a resolver todos los problemas de manera bilateral. Estos puntos están en la línea de la derecha populista radical. Pero Trump no tenía ninguna coincidencia con dos temas: el aborto y matrimonio homosexual. Esos tuvo que incluirlos en su discurso populista.

- ¿Trump tiene posibilidades de ganar la reelección en EE UU en el 2020?

- El discurso de Trump tiene una minoría detrás. ¿Y cómo lo podemos comprobar? Por sus márgenes de aprobación en su gestión como presidente. Tiene un 40% de aprobación. Nunca ha llegado a la mitad más uno. ¿De qué dependen las perspectivas para triunfar en las elecciones? La aprobación presidencial y la tendencia del desarrollo de la economía un año previo a la elección.

- El Brexit ha provocado una crisis política en el Reino Unido. ¿Qué salida puede contemplar Boris Johnson para resolver este tema? 

- Lo más probable es que, ante la pérdida de su mayoría en el Parlamento, Johnson convoque a unas nuevas elecciones generales. Ahora, si Johnson no logra un acuerdo para salir de la Unión Europea (UE), en estos nuevos comicios no ganaría. Además, perdería votos de algunos integrantes del Partido Conservador que tienen una posición de continuar dentro de la UE. Tendría que buscar una alianza con el Partido Laboralista para formar un Gobierno de coalición.

- ¿Pueden aparecer más personajes como el presidente brasileño Jair Bolsonaro en Sudamérica?

- La derecha populista radical ha crecido, según el último resultado del Latiberometro, porque, primero, los movimientos evangélicos han ganado mayor influencia en la política. Y lo segundo, por las crisis de la oleada de partidos de izquierdas que salieron elegidos por voto popular en varios países de América Latina a principios de este siglo. Recordemos las circunstancias de la elección de Bolsonaro: la crisis económica se instaló y el caso Lava Jato mostró la grave corrupción en la clase política. Entonces, la aparición de candidatos como Bolsonaro podría presentarse de acuerdo a las circunstancias que se presenten en cualquier país.

- ¿El presidente Vizcarra apela al populismo con su propuesta de adelanto de elecciones en Perú al 2020?

- El presidente Vizcarra no fue elegido directamente por voto popular, no tiene partido ni bancada parlamentaria en el Congreso. Sin embargo, algunas cosas, como proponer el adelanto de elecciones generales al 2020, no significa que siga un discurso de populista. La situación sería diferente si Vizcarra buscara perpetuarse en el Gobierno. Entonces se le podría acusar de que sea autoritario, pero no este no es el caso.

- ¿Puede surgir un populista derechista ante la actual crisis política en Perú?

- Se puede producir un fenómeno Bolsonaro en un contexto de crisis política que vive el Perú. Un candidato así se definiría como un antiestablechimnt de derecha o izquierda. Como sucedió con Fujimori, quien llegó al poder al aliarse con la izquierda en una posición de rechazo a las propuestas de Vargas Llosa en 1990, y ahora vemos las aspiraciones presidenciales de Antauro Humala. Pero, más allá de los casos que te mencionó, hay mucha volatilidad electoral en el Perú. Aquí un candidato derechista podría acoger la preocupación de la ciudadanía ante una propuesta de izquierda radical que ponga en peligro su estabilidad económica. Hay una alta probabilidad que un populista de derecha pueda estar en una segunda vuelta.