Johnson logra la aprobación de su plan del Brexit en el Parlamento
Boris Johnson ha ratificado su poder político en el Reino Unido. El primer ministro logró el respaldo para ejecutar su plan del Brexit en la Cámara de los Comunes, donde su mayoría conservadora se hizo prevalecer a la hora de la votación. El resultado fue 358 diputados a favor y 234 en contra. Así, el inquilino de Downing Street supera el primer escollo para salir de la Unión Europa el próximo 31 enero del 2020.
“No veamos el resultado electoral como la victoria de un bando sobre otro. Ha llegado el momento de pasar página y de deshacernos de las viejas etiquetas de euroescépticos y defensores de la permanencia”, dijo Johnson al inicio del debate en el Palacio de Westminster. “Esos términos están tan muertos como Montescos y Capuletos al final de la obra”, añadió ante el plano de la Cámara.
El nuevo proyecto de Johnson tiene una serie de diferencias al presentado en octubre pasado. La principal tiene relación a que no habrá más prorrogas para ejecutar la salida definitiva de Bruselas. Para eso fijan una fecha: 31 de diciembre del próximo año. En esa transición, el Gobierno británico y la UE deben establecer cómo serán sus futuras relaciones comerciales para que no haya impacto en sus realidades financieras, respectivamente.
Johnson también ha decidido eliminar de la ley el compromiso de que los derechos de los trabajadores británicos mantendrán su equiparación con los de los de la UE. "Se trata de dar a cada cuestión el vehículo legislativo correspondiente", ha asegurado el ministro para el Brexit, Steven Barclay, en la cadena TalkRadio.
"Ya hemos anunciado otras leyes en el Discurso de la Reina [el texto con las líneas maestras del nuevo Gobierno, que Isabel II leyó este jueves en el Parlamento] que contemplan los derechos laborales. Y a menudo, el Reino Unido ha ido más lejos en su protección que la propia UE", agregó.
Como sea, Johnson ha mostrado su renovado musculo político en la Cámara de los Comunes frente a una debilitada oposición. De hecho, tras las comicios legislativos del pasado 12 de diciembre, la crisis en el Partido Laborista no tiene cuando acabar. Jeremy Corbyn abrió la puerta para que otro agarre el timón de la agrupación ya que, para muchos laboristas, resulta el gran responsable de la derrota. @mundiario
