Jalifa Belqasim Hafter, el poderoso señor del terror del norte de África
Este mariscal del Ejército de Libia ha sembrado el pánico en el continente con sus tropas rebeldes contra el régimen reconocido por la comunidad internacional.
El ataque de este miércoles a un centro de emigrantes en Libia ha sido la última maniobra terrorista en el país africano. A falta de que alguien reclame la autoría del mismo, todo apunta a que el responsable fue Jalifa Belqasim Hafter, un mariscal del Ejército de aquel país que se proclamó a sí mismo como jefe del mismo. Hafter ha emprendido una cruzada contra el régimen y su nombre se ha esparcido como sinónimo de terror en la región. ¿Quién es realmente este veterano soldado?
Hafter (a veces llamado Haftar, Hifter o Huftur) nació en Ajdabiya, Libia, en 1943 en una fecha hasta el momento desconocida. Proviene de la tribu al-Farjani, una tribu con raíces árabes beduinas que habitaron África del norte por siglos. Sus primeros estudios militares los hizo en su país, en la Academia Militar de Bengasi, de donde se graduó para luego completar su entrenamiento militar en las bases de la extinta Unión Soviética.
Haftar fue uno de los principales apoyos de Muamar el Gadafi en el Ejército para derrocar al Rey Idris en 1969. Hafter es secular y nacerista, es decir, seguidor de Gamal Abdel Nasser, presidente de Egipto a la sazón. Era integrante del Consejo de Mando Revolucionario, que rigió Libia tras la revolución que dio con la muerte del monarca mencionado. Años después sería Jefe del Estado Mayor con Gadafi, un dictador que terminaría siendo asesinado en 2011.
Para 1986 se había recibido ya como coronel y fue el comandante de las fuerzas militares de Gadafi en el conflicto entre Libia y Chad entre 1978 y 1987. Haftar y unos 700 de sus hombres fueron tomados como prisioneros de guerra y encarcelados tras la derrota en la llamada Batalla de Maaten al-Sarra.
Aquello marcó el inicio del deterioro de su relación con el dictador Gadafi. Haftar fue acusado de haber traicionado al Ejército al dejar que sus hombres cayeran en manos del enemigo. Aquello puso en contra a ambos y eventualmente Haftar terminaría siendo uno de los principales líderes de la oposición a Gadafi, que sería asesinado de forma despiadada en 2011, año en que Haftar volvía a su país para participar de aquella guerra civil.
Jefe del Ejército Nacional Libio
En 2014 se proclamó jefe del Ejército Nacional Libio que inclinó del lado de las autoridades del Este del país, las cuales no eran reconocidas como comunidad internacional.
El 11 de septiembre de 2016 despojó de cuatro puertos petroleros al Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA). Su idea era conseguir exportar la mitad del crudo extraído en Libia. Un día después, las autoridades del Este de Libia nombraron a Haftar al grado de mariscal de campo.
A finales de 2017 atacó y acabó con los últimos reductos islamistas en Bengasi y tomó el poder del golfo de Sidra, un lugar estratégico para la salida del petróleo del país. En 2018 despojó Derna de las milicias yihadistas que la tenían bajo control y en febrero tomó varias localidades del sur del país, como Sebha, su capital.
En abril del año pasado dio a conocer que sus tropas habían alcanzado Trípoli, sede del Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA), único Ejecutivo reconocido por la comunidad internacional. Aquello causó un terremoto político y diplomático pues apenas un día antes Antonio Guterres, secretario general de la ONU, había llegado al país para acelerar los preparativos de la conferencia nacional que se celebraría en Gadamés entre el 14 y 16 del mismo mes. La idea de aquel evento era traer a razón a Haftar y al GNA. @mundiario
El Ejército liderado por Haftar es básicamente una organización terrorista opositora al régimen reconocido en Libia. Se sabe muy poco de su vida personal y toda su imagen mundial es prácticamente gracias a su carrera militar. Se ha convertido de 2014 para la fecha presente en uno de los principales nombres del panorama político y bélico del norte de África.
