Iglesias ve "inconcebible" que lo impute el Tribunal Supremo
El vicepresidente segundo de Gobierno, Pablo Iglesias no ve en su escenario inmediato una imputación por parte del tribunal Supremo y en consecuencia tampoco maneja en su agenda la posibilidad de dimitir al cargo que ostenta.
“Ni como mera hipótesis concebimos que pueda haber imputación", ha señalado Iglesias. Este miércoles el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón envió una exposición razonada al Tribunal Supremo para que le investigue por el caso Dina.
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Sin embargo, ante la posibilidad de que el tribunal acabe decidiendo su investigación, Iglesias pide “prudencia y esperar”, aunque “es evidente para todo el mundo lo que está ocurriendo”.
Tras sus primeras declaraciones a un medio después de conocerse la petición judicial, Iglesias apuntó que "en este país no han condenado a nadie solamente por sus ideas”. Por tanto, cree que “no va a ocurrir” dada las diferentes interpretaciones que desde muchos sectores se está haciendo del escrito del juez de la Audiencia Nacional.
Advierte de que, en caso de que el Supremo se aviniera a imputarle traería graves afectaciones para “una democracia de la UE” en la que “han pasado cosas graves: qué os voy a decir a los catalanes”, ha mencionado.
Ahora bien, Iglesias se ha quejado de que la decisión del juez García Castellón va a provocar que estemos “tres o cuatro semanas” con este tema en los medios cuando “es demasiado evidente cómo han operado las cloacas del Estado para evitar que hubiera un gobierno que se apoyara de fuerzas republicanas”.
El líder de Podemos, acusa a la derecha de estar dispuesta a todo y con todos los medios para "hacer caer este Gobierno”, ya sean asuntos “legales o ilegales”. García Castellón pide que sea investigado por delitos de descubrimiento y revelación de secretos, con agravante de género, daños informáticos y acusación o denuncia falsa y/o simulación delito en relación con el robo del móvil de su exasesora, castigados con hasta 9 años de prisión.
Por ahora ha contado con el apoyo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y también anoche por la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, quien aseguró que “el Gobierno no tiene ninguna inquietud”, ya que el caso Dina “nada tiene que ver con su labor en el Gobierno”. Pero este asunto contrasta con la petición de cese que lanzó el líder del PP, Pablo Casado, a pocos minutos de conocerse la noticia. @mundiario
