Guatemala se encuentra en estado de alerta por la captura de Joaquín Guzmán

Las redes de negocios de El Chapo incluyen muchos carteles guatemaltecos, por lo que las autoridades están pendientes de cómo reaccionan éstos ante la captura del mexicano.
Una vigilancia extraordinaria fue montada en los 1,000 kilómetros de frontera común entre México y Guatemala, luego de que ayer por la tarde Enrique Peña Nieto, presidente mexicano, anunciara que Joaquín Guzmán había sido capturado nuevamente. Por ello, las autoridades guatemaltecas temen efectos negativos tras esta captura.
El ministro del Interior de Guatemala, Élmer Sosa, anunció que se lleva a cabo una fuerte vigilancia en todas las áreas limítrofes entre ambos países. Sosa advirtió que la captura de El Chapo podría afectar cómo se manejan las organizaciones de narcotraficantes en las fronteras, pues tanto mexicanos como guatemaltecos son socios en la materia de venta y distribución de drogas. "En este momento, las unidades de inteligencia y de análisis están empeñadas específicamente para poder identificar si realmente (el arresto de Joaquín Guzmán) podría tener un efecto negativo en el tema de seguridad", declaró el funcionario.
Joaquín Guzmán había logrado escapar de una cárcel de máxima seguridad el año pasado, y tuvieron que pasar 6 meses para que pudiera volver a ser capturado. Vale decir también, que ya en 1993 el mismo personaje había sido detenido en Guatemala y extraditado a México. Por si la historia no era suficiente, Guzmán habría hecho negocios con Otto Pérez Molina (años después presidente de Guatemala) para pactar no ser capturado.