La Guardia Islámica, así es la banda terrorista estatal de Irán

Integrantes de la CGRI.
Integrantes de la CGRI.

Pese a tener un carácter y misión puramente religioso y tradicional, estos cuerpos armados han irrumpido en la escena internacional por sus recientes ataques.

La Guardia Islámica, así es la banda terrorista estatal de Irán

Los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) han cobrado gran protagonismo en las últimas semanas a raíz de la escalada de tensión entre Irán y Estados Unidos. La primera potencia mundial acusó la semana pasada a este grupo armado de haber sido la responsable de explotar un navío en pleno golfo de Omán. Las autoridades iraníes lo negaron, pero el nombre quedaba revoloteando por primera vez en el ambiente. El jueves de esta semana, fueron los mismos cuerpos los que se apuntaron el ataque a un dron estadounidense que revoloteaba en espacio aéreo no internacional. Con eso, su nombre se implantó definitivamente como uno de los importantes en el tira y afloja de este conflicto. ¿Qué son exactamente estos cuerpos y cuál es su misión?

Se trata de una rama de las Fuerzas Armadas de Irán, la cual fue fundada tras la Revolución Iraní de 1979. Su fundación fue encargada por Sayyid Khomeini, el ayatolá que encabezó aquella insurgencia. Es una especie de ejército religioso, pues mientras las Fuerzas Armadas tradicionales se encargan de proteger las fronteras del país y mantener el orden en el interior del mismo, los CGRI se encargan de proteger el sistema islámico, según lo dicta la Constitución. Por proteger el sistema islámico se entiende prevenir interferencias extranjeras y potenciales golpes de Estado organizados desde dentro del Ejército o movimientos insurgentes.

El CGRI, cuya fecha exacta de nacimiento es el 5 de mayo de 1979, fue un esfuerzo de consolidar varias fuerzas paramilitares en una única fuerza leal al nuevo gobierno y como contrapoder a la influencia y poder del Ejército tradicional, que cuando cayó la monarquía era visto como un potencial obstáculo para el establecimiento del nuevo régimen. Así, desde el inicio del nuevo Gobierno, ya deliberadamente islámico, este nuevo cuerpo funcionó como un ejército de fieles de la fe. La Constitución dictó, como ya se mencionó, que el Ejército tradicional se encargaría de proteger el territorio nacional y su orden interno, mientras que el CGRI defendería la revolución en sí que cambió el país.

En volumen de efectivos es bastante discreto, pues según su monografía de Wikipedia no tiene más de 125,000 miembros repartidos en sus ramas aéreas, navales e infantería. Sus fuerzas navales mantienen el control del Golfo Pérsico, siendo la rama más importante y poderosa de todas. 

A diferencia del Ejército tradicional, estos centinelas del Islam están muy envueltos en varios aspectos de la sociedad iraní. Eso último a raíz de la autoridad que les confirió el expresidente Mahmoud Ahmadinejad, especialmente a raíz de su reelección en 2009. Algunos analistas han llegado a asegurar que a día de hoy el poder de estos grupos armados está a la altura del sistema clérico Shia.

Pese a su carácter intrínsecamente religioso, y a que opera básicamente apenas en las inmediaciones de Irán, el CGRI, comandado por Hossein Salami, es considerado por Estados Unidos y Arabia Saudí, entre otros, como una organización terrorista. Y vistos los medios y el margen de maniobra con que el régimen los ha investido, probablemente sí pueda ser considerada como tal.

Salami mismo salió a reconocer el ataque al dron estadounidense, pese a que éste solo estaba revoloteando el país, escapando así a la jurisdicción del cuerpo que, nuevamente es solamente religioso. El derribamiento del aparato fue un nuevo episodio en la escalada política y diplomática entre Teherán y Washington D.C. @mundiario

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