Gonzalo Iglesias López, toda una carrera política en el centro

Gozalo Iglesias López con Adolfo Suárez
Gozalo Iglesias López con Adolfo Suárez.

Gonzalo Iglesias López es un farmacéutico y político de raza y vocación que ha sido todo un referente en la UCD y en el CDS y ahora, después de unos años, vuelve con fuerza y convicción desde Ciudadanos.

Gonzalo Iglesias López, toda una carrera política en el centro

Como farmacéutico, Gonzalo Iglesias López ejerció su trabajo primero en Celanova (Ourense), su pueblo natal, y en 1997 se trasladó a vivir en A Coruña, donde sigue ejerciendo y es un referente en su profesión. Considerado también como uno de los referentes gallegos en formaciones políticas clave en la historia reciente de España, como han sido la Unión de Centro Democrático (UCD) y el Centro Democrático y Social (CDS), vuelve en su nueva etapa política con Ciudadanos. Su interés por servir a la sociedad desde la política viene desde joven, ya que fue concejal en Celanova con el CDS y diputado provincial en Ourense también con el CDS, de ahí su estrecha relación con Adolfo Suárez, el artífice de la transición desde el centro. Su padre fue alcalde de Celanova y su primo, que lleva su mismo nombre, llegó a ser alcalde de Xinzo de Limia con el PSOE. Dentro de sus cualidades destaca su cercanía y sociabilidad, así como el interés en los problemas de los ciudadanos. Es político de calle  y de estar en contacto directo con la gente, patear pueblos y ciudades, escuchar a todo el mundo y ofrecerse a que quien lo desee pueda comunicarse con él directamente; no es un hombre de despacho, sino que es "un hombre del pueblo y para el pueblo", siempre preocupado por los más desfavorecidos para luchar por la igualdad de oportunidades. Conocedor del medio rural interior gallego y del medio urbano, su experiencia en la política local intensifica un compromiso militante y le facilita una perspectiva abierta de Galicia en todo su conjunto para poder reclamar y defender, desde su partido Ciudadanos, en leyes y proyectos lo que Galicia necesita.

Gonzalo Iglesias López. / Mundiario

Gonzalo Iglesias López. / Mundiario

– ¿Cuáles serían sus prioridades si saliese elegido senador?

– Mi prioridad respecto al Senado sería una reforma que le dotarse de competencias, sobre una verdadera representación territorial, donde se defendieran los intereses y necesidades de las comunidades autónomas y de las provincias. Al fin y al cabo, los senadores salen elegidos por las provincias en sufragio universal y por nombramientos de las comunidades autónomas. El Senado es una cámara que debe cumplir su misión dentro del orden constitucional.

–¿Cómo se puede poner en positivo el papel político del Senado?

– Lamentablemente, la concepción que tiene la ciudadanía respecto al Senado es que se trata de una institución baldía, sin competencias definidas. Esta afirmación nos es rigurosamente cierta, pero si es verdad que necesita una reforma que convierta al Senado en una verdadera cámara de representación territorial. Al fin y al cabo, como decía, los senadores son elegidos por demarcaciones provinciales y por designación autonómica, y estos deben presentar iniciativas que se traduzcan en beneficios para la ciudadanía, y para eso son elegidos. En definitiva, llegar a consensos, independientemente de las formaciones políticas a las que pertenezcan. Diálogo y tolerancia son imprescindibles anteponiendo los intereses de los ciudadanos a los intereses partidistas. Por la tanto una reforma del Senado en este sentido, es fundamental para que el mismo tenga competencias propias y no sea un ente en el que solo se ratifican, enmiendan o rechazan las propuestas que vengan del Congreso.

– ¿Qué puede hacer Ciudadanos por Galicia? ¿A qué se debe que hasta ahora no haya cuajado con representantes políticos como en otras comunidades de España?

– Pues probablemente hasta hace unos meses, las personas que había no eran –salvo excepciones como en Lugo– las idóneas para desarrollar el proyecto de Ciudadanos. Bien es cierto que el partido en Galicia ha crecido exponencialmente, con un incremento importante de las agrupaciones. Ha habido en ciertos momentos, tensiones y luchas internas que nos han hecho mucho daño, y la responsabilidad es de todos, pero de unos más que otros. Unos, por no saber leer la hoja de ruta, y otros, por destruir en vez de crear. Hemos tenido dificultades también porque a las formaciones políticas del PP y PSOE les intranquiliza mucho nuestra presencia porque saben que no estamos dispuestos a mantener ni un minuto más ese bipartidismo nocivo al que nos tenían acostumbrados. Han llegado a utilizar a la CRTVG para suprimir nuestra presencia en los debates y hay una orden expresa de la Xunta para negarnos sistemáticamente nuestra presencia en los medios informativos.

– ¿Y de puertas adentro?

– También es cierto que no se ha filtrado bien las nuevas incorporaciones al partido, y así se han detectados personas que solo vienen para arreglar su vida personal, lo que se llaman arribistas. Yo que ya llevo en el partido cinco años, he sido consciente de este fenómeno. Espero que estas actitudes se vayan diluyendo y los que se acerquen a Ciudadanos vengan a solucionar problemas, no a crearlos. Porque Ciudadanos por Galicia puede con su programa dar un aire fresco a la política de esta comunidad. Tiene grandes propuestas y realizables.

– ¿Cómo ve al PP?

– El voto útil que pide el PP es el voto útil para ellos, no para la ciudadanía. Hay que hablar de voto responsable, que es otro concepto. El voto útil del PP es una vez más una alegoría para infundir miedo, porque tienen miedo al cambio que se avecina inexorablemente. Han utilizado siempre el voto cautivo en el rural porque no había información, pero ahora con las nuevas tecnologías la información llega a todas partes.

– ¿Qué distingue a Ciudadanos?

– Ciudadanos propugna la preparación y la meritocracia entre sus posibles candidatos, salvo alguna excepción. Las propuestas de Ciudadanos para Galicia y el resto del país son claras y transparentes. Soy de los que pienso que una administración no se gestiona desde un despacho, hay que bajar a la arena, contactar con la población a través de los distintos medios de los que se disponga, pero lo más importante es hablarle a la gente a la cara, sin arrogancia, con humildad. Quiero en este sentido partir una lanza por nuestra candidata al Congreso por A Coruña, Marta Rivera, preparada y con muchas ganas de luchar por nuestra querida Coruña. Estoy seguro de que con ella lo conseguiremos.  

– Respecto a Galicia y a la provincia de A Coruña en concreto, ¿qué medidas ve necesarias y de urgencia?

– Tanto Galicia como A Coruña necesitan respuestas urgentes, que hagan posible poner a ambas en los niveles que le corresponden. A Galicia, siendo la quinta en población y sexta en PIB de 17 comunidades, le corresponde estar en una situación que sea referente en todo el Estado. Sus importantes sectores primarios, como la agricultura, ganadería y pesca, tienen un potencial extraordinario que hay que desarrollar. De estos sectores viven muchas familias que hay que cuidar y mejorar. Otros temas como las comunicaciones, son vitales para Galicia. El corredor atlántico, tan importante para mover nuestras mercancías, requiere infraestructuras ferroviarias y portuarias, adaptadas a las necesidades actuales. También destacaría la potenciación de energías renovables como la eólica y retomar proyectos de construcción de drones, como el proyecto en Trasmiras (Ourense), donde la OTAN tenía interés en estas instalaciones, y que por culpa de las administraciones, tanto central como autonómica, acabó en Doñana por capricho de los políticos de turno. En A Coruña, al ser una ciudad abierta al mar, sus comunicaciones, turismo y pesca son prioritarias.

– Hablando de infraestructuras, ¿es la AP-9 el gran problema?

– La AP-9 está amortizada desde hace años y con las nuevas concesiones que parten de la amortización cero no se entienden los incrementos de los costes para los usuarios gallegos. En realidad, la AP-9 es la vía básica para moverse en las zonas más desarrolladas de Galicia pero soporta una nefasta gestión, que afecta al usuario en sus costes diarios de desplazamiento, hasta el 2048, lo que provocará pagar 68 años para el tramo más antiguo Santiago - A Barcala (A Coruña). Un trabajador de la zona de Ferrol no puede trabajar en Vigo o viceversa y volver en el día por este coste inasumible en coche por autopista, que supondría más de 1.200 euros mensuales. Esto es consecuencia del regalo de la época de Aznar ampliando 25 años la concesión a favor de las empresas amigas y provocará que paguemos 28 años más de lo económicamente defendible para una autopista.

– ¿Una solución sería la construcción de la A-57 Cambre-Vigo?

– Si no se construye la A-57 nos ahorramos como mínimo 1.500 millones de euros y con este ahorro se podría negociar con los propietarios de AP-9 una indemnización anual hasta finalizar la concesión.

– ¿Qué posición defiende para el AVE?

– El beneficio social para Galicia de unas buenas comunicaciones es fundamental y los gallegos en general nos sentimos más aislados del resto de España. Pero además del AVE debemos potenciar el corredor atlántico con todo lo que conlleva. Nuestras mercancías deben moverse con facilidad. En las estaciones intermodales, la descoordinación es absoluta entre la Xunta de Galicia y Concello de A Coruña. Además, este último deja escapar ayudas de la UE, lo cual es muy grave. Lo mismo pasa con los concellos de Ferrol y Santiago, gestionados por las Mareas.

– Los puertos de A Coruña son los más cercanos a América pero parecen trabajar a medio gas. ¿Qué procede hacer?

– Los dos principales puertos de la provincia como son Langosteira en Arteixo y Ferrol no tendrán comunicación por tren hasta dentro de 4 o 5 años. Ferrol está especializado en contenedores y seguirá recibiendo carbón para As Pontes, y A Coruña básicamente mueve cereales, petróleo y derivados, por lo cual hay que trasladar ya las instalaciones de Repsol, pegadas al barrio de los Castros, con alto riesgo. Hay que inertizar el oleoducto que cruza la ciudad y retirar las descargas del centro por el polvo en suspensión que tantas urgencias ha provocado en el hospital de niños y mayores. La deuda pendiente de 300 millones de euros del puerto de Arteixo puede pagarse con facilidades y plazos necesarios, y no es de recibo condonar una cifra similar en Valencia por las inversiones en la zona portuaria de la Copa América y la Fórmula 1 y ahogar por el contrario las inversiones realmente productivas.

– ¿Qué pasa con Galicia y los incendios?

– La falta de rigor en el tratamiento de los incendios forestales se debe a  una falta de prevención total y absoluta.

– Galicia cuenta con el índice de natalidad más bajo de España junto con Asturias. ¿Qué solución propone Ciudadanos?

– Es uno de los grandes problemas de Galicia. Está claro que para fomentar la natalidad tiene que ir unido a una situación económica estable en la pareja. Por lo tanto, es de sentido común que, si no se facilita el acceso al mercado laboral, va ser difícil solucionar este problema. Consecuentemente hay que ayudar a las pymes a seguir creando empleo, con rebajas fiscales y el fomento de la I+D+i. Ciudadanos propone rebajar el epígrafe de familia numerosa de tres hijos a dos, con una subvención de 1.200 euros al año para ayudar en los estudios, guarderías, etc. Si no rompemos esta inercia, el envejecimiento de la población traerá como consecuencia menos cotizantes poniendo en peligro el mantenimiento de las pensiones. @mundiario

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