El gasto y el número de pensionistas sigue batiendo registros sin tregua

Dos jubilados. / huffingtonpost.es
Dos ancianos jubilados. / huffingtonpost.es

Cuando la llegada a la jubilación de las generaciones de 3, 4 ó 5 hijos se suma a la incapacidad de crear puestos de trabajo, la recaudación no soporta el gasto.

El gasto y el número de pensionistas sigue batiendo registros sin tregua

No es un problema español, es un problema generacional que afecta a todos los países donde existe un sistema de pensiones justo, eficaz y costoso, con la pequeña diferencia de que en otros lugares se han tomado medidas a lo largo de todos estos años y gozan de mayores coberturas, mayores pensiones, mayores ayudas, y la certeza de que el sistema cubrirá su vejez, lo que no les impide complementar sus ingresos con planes de pensiones privados gracias a sus saneados ingresos.

Mi abuela, y durante un tiempo mi madre, priorizaba el gasto. Cuando entraban en casa los ingresos guardaba en un bote de cristal el dinero que no se podía tocar, el imprescindible para una vida digna, el pago de las cuotas de las deudas, si las había, el importe del alquiler, los recibos de la casa y el colegio, y además separaba un importe para comer dignamente y también una pequeña cifra de imponderables como medico o ropa. Si quedaba algo iba a mano de mi  abuelo, o mi padre según el caso, para tomarse un café o ir al cine. Eran tiempos en que se cobraba en metálico y no se domiciliaban los pagos, había cobradores que iban de piso en piso y las personas eran muy responsables. Ahora lo que le gustaría hacer a los representantes del Estado es invertir el reparto porque ya no se ven gente humilde. Primero se toman el café, mejor con copa, se reparte el dinero para caprichos, y si sobra se pagan las pensiones

Nos escandalizamos, o más bien tratan de escandalizarnos, de que haya escasamente dos cotizantes por cada pensionista, casi 9,5 millones de clase pasiva por 17 millones de clase activa, pero no nos escandaliza que tengamos dos políticos por cada politico europeo como media, o que superemos en  cientos de miles de politicos a Alemania pese a que nos supere en niveles administrativos por ser un estado federal,. No nos irrita lo suficiente que nuestra inflada burbuja politica no estalle y que se sustente sobre una pléyade de amigos, simpatizantes y familiares contratados como asesores, o del despilfarro de las Diputaciones o el Senado.

Dejemos los lamentos y las predicciones catastrofistas para ponernos manos a la obra de garantizar las pensiones para que los más jóvenes se sientan animados a cotizar y para las pensiones más altas, cosa que ahora no sucede por lo que les empujamos a vivir el presente aceleradamente ya que el futuro se lo pintamos muy incierto. Solo hay que hacer lo que hacían nuestras abuelas, priorizar los gastos ineludibles, los sociales, pensiones, salud y enseñanza, y luego ir añadiendo hasta que el presupuesto se acabe sin endeudarse más. No es tan difícil, Europa lo lleva haciendo mucho tiempo. Han sacado pensiones no contributivas de la caja de la Seguridad Social, las han pasado a los Presupuestos Generales, y han reducido otros gastos y creado soluciones imaginativas. Lo que no se le ha ocurrido a nadie es que sea viable dejar desamparados a nuestros mayores para dejarlos morir en la indigencia. Antes preferimos dejar de pagar a los políticos, al estilo suizo, que dejar de atender nuestros logros sociales.

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