La Fiscalía prorroga seis meses todas las investigaciones abiertas a Juan Carlos I
El ministerio público apura hasta junio las pesquisas contra el rey emérito para estudiar la documentación remitida por Suiza sobre sus finanzas.
La Fiscalía General del Estado ha prorrogado durante seis meses más las dos diligencias de investigación abiertas a Juan Carlos I que caducaban esta semana: el supuesto cobro de 65 millones de euros por su intermediación en la adjudicación del AVE a La Meca; y el uso por parte del rey emérito de fondos del empresario mexicano Allen Sanginés-Krause.
Así, el ministerio público puede apurar hasta junio todas las pesquisas contra el padre de Felipe VI, ya que la última diligencia en abrirse, la referida a un trust que habría permitido al monarca mover 10 millones de euros escondidos en la isla de Jersey, ya había sido prorrogada por la fiscal general del Estado, Dolores Delgado a mediados de mes.
Sin embargo, la intención de los fiscales es no agotar dicho plazo: las investigaciones permanecerán abiertas únicamente por el tiempo que sea necesario para poder estudiar al detalle la documentación remitida por Suiza sobre las finanzas del emérito tras su abdicación en 2014, cuando dejó de estar protegido por la inviolabilidad que la Constitución española reconoce al Jefe del Estado.
Ahora mismo, la Fiscalía espera que la Oficina Nacional de Investigación al Fraude (ONIF) examine la última documentación recibida desde Suiza, que hace referencia a apuntes contables de la Fundación Zagatka, fundada en 2003 por Álvaro de Orleans-Borbón, primo lejano de Juan Carlos I, quien le sufragó gastos de vuelos privados: más de ocho millones de euros en vuelos privados de Juan Carlos I y otros tres millones en vuelos de Corinna Larsen, que terminó devolviendo la suma a requerimiento de Orleans.
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No obstante, los investigadores no prevén que los nuevos datos cambien el rumbo de las diligencias, por lo que tienen previsto archivar en las próximas semanas al menos las dos primeras investigaciones, adelanta El País En relación a la tercera investigación, la Fiscalía continúa analizando documentación enviada por las autoridades británicas, pero tampoco se contemplan novedades y la previsión es archivarla.
Las pesquisas han arrojado la conclusión de que es imposible perseguir a Juan Carlos I por algunos de los hechos que se le atribuyen por varias razones: los delitos que se persiguen habrían sido supuestamente cometidos antes de la abdicación del rey emérito en 2014; la prescripción o la falta de otras pruebas para pedir su imputación o las dos regularizaciones fiscales presentadas por el emérito en diciembre de 2020 y febrero de 2021. @mundiario
