Feijóo poseído

Alberto Núñez Feijóo, líder del PP. / Partido Popular de Galicia.
Alberto Núñez Feijóo. / Partido Popular de Galicia.

Acusar a un socialista de maquinar con un fascista es la peor acusación posible. Entiendo que para él no debe ser tan grave porque su partido gobierna en Andalucía con Vox.

Tras el fracaso de la política de la crispación, introducida por el fascismo táctico, España se ha quedado descansando. Ojo, aclaremos que aunque montar el follón permanente fue idea de Steve Bannon y sus locos mentirosos, el maestro supremo fue Casado, devorador de felones y comunistas. Pero se acabó. Ya nadie grita y a quien grita nadie la hace caso. Por ahí andará Inés Arrimadas tomando bicarbonato por las esquinas de lo irritado. Y quiero suponer que algún alma piadosa sedó a su sobresaltadísima Cayetana Álvarez de Toledo, marquesa de Irritada. Un descanso para España. Heil Cayi.

Pablo, ahora el manso, se traga el sapo sin perder su sonrisa. Gran Jefe Ánsar le habrá dicho que con estas maneras no se va a ninguna parte, que ya te lo decía yo. Ahora el PP parece un convento de clausura. Pero no nos fiemos. La tanatosis, hacerse el muerto, es una táctica usada por algunas especies animales para no ser devorado o para tomar por sorpresa a su enemigo. Pablo casado es todo un animal tanatóxico por ambos lados.

Pero alguien en el PP se niega a volver a la sensatez: Alberto Núñez Feijóo ha roto las marcas de la indecencia política al asegurar en Sede Parlamentaria que Vox es el socio del PSOE. Con un par. O sea, propone que Pedro Sánchez se sienta con Abascal a pactar en secreto una táctica para dividir a la derecha. Para Alberto se trata de otra fechoría del Presidente del Gobierno con "un resultado lamentable para la mayoría de los españoles que no querían que el PSOE gobernase".

Quizá don Alberto ve perdidas las próximas elecciones autonómicas y prefiere suicidarse mediáticamente. Sigue en la línea clásica del PP; si ves que pierdes revienta la paz democrática. Quizá no comprende que acusar a un socialista de maquinar con un fascista es la peor acusación posible. Entiendo que para él no debe ser tan grave porque su partido gobierna en Andalucía con Vox. Están acostumbrados a meter las manos en la harina. Siempre aparece la harina con Feijóo. 

Pero lo peor no es la estúpida acusación sino considerarse, como los fascistas, interprete de la voluntad del pueblo español, incluso por encima de lo dictado por los votos. Feijóo debe ser primo de Dios. Por lo menos. Yo le pregunto, si no querían socialismo, ¿para qué votaron masivamente al PSOE? ¿Fueron engañados por el rojo malo? ¿Somos tontos y debemos acudir a él para que nos diga cuales son nuestros deseos e intereses? En fin, su deriva guerra civilista causa pavor. En un arrebato quema Santiago mientras canta el Cara al sol con lira y corona de laureles.

Pocas veces en la historia parlamentaria gallega albergó el Hemiciclo una barbaridad de tal calibre y expresada, además, con tanto resentimiento y odio. Un grave desprecio a la democracia que espero le pase factura en las Autonómicas. @mundiario

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