Enfrentamientos violentos en Nuevo México por la presencia de Donald Trump

Albuquerque, Nuevo México, acogía la noche del pasado martes 24 de mayo un evento de Donald Trump, el candidato republicano a la Casa Blanca. El magnate llegaba al acto electoral victorioso tras las primarias del estado de Washington y convertido, prácticamente, en el nominado presidencial republicano (faltaría que se ratificase en la Convención Nacional Republicana del próximo mes de julio y que a buen seguro no estará exenta de polémica).

Este es el panorama político de Donald Trump, dulce caramelo para el magnate tornado en sabor más amargo cuando se echa un vistazo a lo que ocurre entre la población no partidaria de que Trump sea el próximo presidente de EE UU.

Manifestantes irrumpieron en un evento de Donald Trump en Albuquerque, Nuevo México, la noche del martes, arrojaron botellas y piedras y rompieron una puerta en la que ya es la última refriega de la campaña del candidato republicano, pero ¿será realmente la última?

La policía de Albuquerque ha hecho uso de la red social Twitter para informar de lo que estaba sucediendo. Informaron de que piedras y botellas fueron lanzadas a sus caballos, pero minimizaron sus enfrentamientos con los manifestantes, señalando en Twitter que no se había utilizado gas lacrimógeno y ni habían detenido a ninguno de los manifestantes.

Los manifestantes, contrarios a Donald Trump, les movía la retórica antiinmigración que el magnate ha utilizado durante toda la campaña de primarias y este no se trata del primer caso de violencia en un evento de Trump. En marzo, hubo choques violentos entre los partidarios y los manifestantes de Trump en Chicago, en un evento que Trump decidió cancelar.

El magnate candidato del Partido Republicano ya ha dado su opinión vía Twitter de lo sucedido acusando a los manifestantes de "matones" que ondeaban la "bandera mexicana".