De las elecciones del Brexit a las elecciones del terrorismo

Jeremy Corbyn y Theresa May. / RRSS
Jeremy Corbyn y Theresa May. / RRSS

El Reino Unido apura la campaña electoral en un agitado clima social, político, y mediático desde el atentado de Londres del pasado sábado.

De las elecciones del Brexit a las elecciones del terrorismo

Estamos en la víspera de unas elecciones que cambiarán el Parlamento y, tal vez, el gobierno británico. La nación, en plena desconexión de la Unión europea, se encuentra en estado de consternación y enfangada en un agrio debate político por las acusaciones de negligencia al gobierno, más aún después de los atentados yihadistas del pasado sábado.

A 24 horas de las elecciones seguimos sin que haya finalizado aún la identificación de cuatro de las personas asesinadas, entre las que se encuentra el ciudadano español Ignacio Echevarría. La operación policial sigue abierta porque todavía deben esclarecerse los vínculos de los tres asesinos con otras personas sospechosas de actividades islamistas.

Mientras tanto, la primera ministra ha visto cómo se desplomaba la enorme ventaja electoral que le sacaba a su adversario, el laborista Jeremy Corbyn. En tan sólo un mes, y según diferentes encuestas, ha pasado de superar a los laboristas en 23 puntos a encontrarse a tan sólo 2 en la recta final de campaña.

Lo cierto es que la expectativa de voto de los conservadores sigue por encima del 40 por ciento por lo que esa caída se explica por la extraordinaria remontada del principal partido de izquierdas. El bipartidismo resurge con fuerza en las islas británicas sumando entre conservadores y laboristas el 78% de la intención de voto, algo que no ocurría desde 1979.

La señora May tiene 24 horas por delante para defender esa pequeña ventaja electoral, que no le asegura mayoría en el Parlamento. El sistema electoral británico establece un diputado por circunscripción, el que gana el escaño se lo queda, el que lo pierde se queda sin nada, por lo que habría que escudriñar los sondeos distrito a distrito para realizar una estimación más acertada pero, aún así, es más que probable que May, creyendo aumentar su mayoría cuando convocó elecciones, se quede ahora con una mayoría minoritaria que le hará mucho más difícil el gobierno.

Los laboristas, mientras tanto, exprimen la polémica por el recorte de plantilla de la policía, que fue ejecutado personalmente por May cuando ejercía de ministra de Interior con David Cameron al frente del gobierno. Los conservadores, en su urgencia electoral, insisten en que el problema son las leyes que coartan la actuación de la policía.

Lo inexplicable, en todo caso, es que nuestro conciudadano, Ignacio Echevarría, siga desaparecido cuatro días después del atentado y que, para colmo, la policía le pida a sus familiares que aguanten 24 o 48 horas más. ¿Significa esto que el gobierno de May espera a que pasen las elecciones antes de confirmar el fallecimiento de Echevarría? ¿En qué circunstancias? Informaciones periodísticas aseguran que el ciudadano español no se encuentra entre los heridos.

Resulta inexplicable la agonía por la que está pasando su familia y más si cabe si es que son los comicios de mañana el motivo por el que la policía británica continúa pidiendo paciencia. @EgeaPilar

MUNDIARIO te ofrece suscribirte a otros análisis de Política

 

Comentarios