Duarte se fue de México en noviembre, probablemente con un pasaporte falso

Javier Duarte tendrá muy orgullosos a sus padrinos políticos del PRI. Aparte de ser el criminal de moda en México, resulta que se las ingenió para escapar sin que nadie lo viera. El exgobernador de Veracruz cruzó la frontera hace un mes y medio como mínimo. O cuando menos eso es lo que su abogado dijo ante un juez el pasado 4 de noviembre pero que hasta ahora se hizo público gracias al diario Reforma. “El señor Javier Duarte Ochoa se encuentra fuera del país atendiendo diversas cuestiones, es cierto. Razón por la cual mi representado no puede comparecer de manera personal”, aclaró el abogado aquel día.

El pasado 18 de octubre, el magistrado ordenó la captura de Duarte por los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita. La Procuraduría General de la República (PGR) puso a disposición una recompensa de hasta 750,000 dólares a quien proporcionara información para dar con el paradero del exgobernante.

Durante su última aparición pública, Duarte manifestó que renunciaba a su puesto para poder enfrentarse a la justicia con tranquilidad. “El que nada debe, nada teme”, dijo en aquella entrevista televisada el 12 de octubre. Obviamente mintió, como priísta respetable.

Aquello fue cuando a su mandato le quedaban apenas 48 horas y desde entonces no ha vuelto a ser visto. Con el paso del tiempo se fueron conociendo más detalles, como que utilizó un helicóptero propiedad del Gobierno de Veracruz para emprender un viaje hacia el sur de su estado. Posteriormente, fue localizado en Chiapas, cerca de la frontera con Guatemala. Es mas, un primo de su esposa fue detenido en aquel lugar con dos pasaportes falsos. Uno tenía la cara de Duarte y el otro, la de la esposa de éste. El documento con la imagen del expolítico llevaba el nombre de Alex Huerta. Su fotografía estaba retocada y se le había aplicado un delgado bigote.

En México han corrido varias de las acciones corruptas que se le suponen a Duarte. Su Gobierno se habría encargado de desviar hasta 1.700 millones de dólares de las arcas del estado, según un cálculo hecho por la Auditoría Superior de la Federación. Aparte se ha conocido que Duarte y sus testaferros tienen propiedades de alto valor en México, Estados Unidos y España.

El PRI, partido oficial y el que lo tenía como uno de los posibles sucesores de Enrique Peña Nieto, le expulsó de sus filas a finales de octubre. En junio, Duarte incluso se burlaba de quienes le acusaban, pero terminó perdiendo las elecciones estatales, algo inaudito en la historia de Veracruz, que siempre había tenido gobiernos priístas. Posterior a su expulsión de su alma máter, se conoció que Duarte ya tenía hasta 60 denuncias en su contra por desvío de fondos. @hmorales_gt