¿Podría desaparecer el PSOE como desaparecieron UCD, PSP o CDS?

El PSOE ha comenzado a dar fuertes golpes de espada pero el toro sigue ahí y no se ven toreros capaces de torearlos, y además lo toros no están de moda.

El PSOE se descompone en un momento de gran incertidumbre donde los ciudadanos asistimos asombrados al espectáculo de ver que en un sitio tan emblemático como la capital de España solo UPyD tiene candidatos a la Alcaldía y la Comunidad. ¿Y los demás? Con sus luchas internas por el sillón o por alejar aquellos que se les han descubierto casos de corrupción o es muy probable que se les descubran a corto plazo. 

Todo viene de aquellos tiempos en que los casos Filesa o Naseiro dejaron al descubierto la financiación ilegal de los partidos. No se quiso asumir entonces y tampoco se asume ahora con los casos Gurtel o los ERES andaluces, que contaminan partidos de derecha, de izquierda y sindicatos. No hay valor para hacer una limpieza a fondo y regenerar la vida política con los que queden sin contaminar, que son pocos, porque lo de yo no sabía nada, no me enteré, ni lo sospechaba, es algo que ya va siendo hora de que nuestros políticos se den cuenta de que no es creíble. Todo esto ha llevado al hundimiento de todos los partidos en aras de gente nueva que no han tenido mucho tiempo de contaminarse, aunque en la medida de los posible parece ser que la ley tampoco es una barrera para ellos. El único que tiene alguna posibilidad de parar la caída libre es el PP por el carisma del poder y porque la situación financiera les favorece gracias a la vuelta del turismo, la caída del precio del petróleo, y los bajos tipos de interés.

Centrándonos en lo que fue el emblema del centro izquierda, el PSOE, asistimos al mismo proceso de salvar al aparato y eliminar personas, poner caras nuevas desconocidas, y atacar al PP prometiendo reformar leyes cuando estén en el poder sin dar muestra alguna de que eso pueda suceder a corto plazo. Sobre la base de que el País necesita un centro fuerte con sentido de estado, deberían dejar de montar espectáculos contínuos y hacer la limpieza desde dentro, antes de que la hagan los jueces y no detrás, y esto vale para todos. El paso fundamental es devolver a la vida pública a pesos pesados sin sospechas sobre ellos y que ahora están en la reserva. Es la guerra y los reservistas deben ir al campo de batalla. No esta mal la llegada de Susana Díaz, pero hay que pasar a primera línea a Chacón, Bono, Gabilondo, y cualquier valor sin contaminar y no quemado como puedan ser los expresidentes, y completar el elenco con alguna gente de la cantera. Esto es como el fútbol, algunas veces las cosas no se arreglan cambiando algún jugador y se necesita un cambio muy grande hasta en la forma de jugar, en los planteamientos.

Hoy hablamos del PSOE por los acontecimientos de ayer con la destitución fulminante de Tomás Gómez en un golpe de autoridad, pero mañana será otro. Cuando las barbas de tu vecino veas pelar...