¿Debería cesar Iglesias por lo que dice de España por la corresponsabilidad del Gobierno?

Una de las características definitorias del Gobierno de la nación, como órgano constitucional es que es un “órgano colegiado”, de ahí que cuando se producen faltas de sintonía dentro del mismo se produzca una crisis y el presidente, que es quien marca la línea, prescinda o sustituya a alguno de sus ministros y ello se debe a que la actuación del Gobierno está regida por los siguientes principios de funcionamiento: el ya citado de la colegiación; pero sobre todo por el “principio de solidaridad”; es decir que el Gobierno en conjunto responde en forma solidaria por la actuación de cada uno de los miembros del Gobierno. Ademas obviamente del principio de respeto al orden constitucional. En función de estos principios, se observan disonancias notables que se vienen produciendo entre él mismo y otros miembros de su Gobierno de coalición, pues emergen justamente los fantasmas, ahora realidades, que temía que no lo dejaran dormir. Y sobre todo, porque no tome las medidas adecuadas en su mano.

El matrimonio de ministros formados por Irene Montero y Pablo Iglesias están dando muestras evidentes no ya de su capacidad creativa que no parece acomodarse a lo que propone el partido del presidente, sino que uno y otro recuperan la dialéctica de cuando gritaban en la calle ante el Congreso de los Diputados. Pero si en el caso de la señora Montero algunas de sus propuestas rozan el pintoresquismo, las de Pablo Iglesias retoman en esta puro aquellas ideas que prometían quebrar el sueño del doctor Sánchez caso de tenerlo en su cámara (de Gobierno, quiero decir)

El señor vicepresidente del Gobierno acaba de decir que España en una democracia imperfecta porque hay exiliados y presos políticos: Es decir, que él mismo forma parte de un Gobierno que tales cosas consiente. ¿Se acuerdan cuando Pedro Sánchez decía que no podría dormir teniendo en el Gobierno al dirigente de Podemos que decía que en Cataluña había presos políticos? Pues lo sigue diciendo. ¿Y de qué modo?: En una entrevista al Diari Ara ha dicho: “como vicepresidente del Gobierno español tengo  que reconocer que no hay una situación de plena normalidad política y democrática en España cuando los líderes de los dos partidos que gobiernan Cataluña, uno está en prisión y el otro en Bruselas”.

Nótese que subraya que habla “como vicepresidente del Gobierno”. Y el Gobierno es un órgano colegiado y sus miembros corresponsables de sus actos. Y desde Rusia se ha dicho algo parecido, la ministra de Exteriores,  Arancha González Laya, tuvo que salir al paso de homólogo ruso Serguéi Lavrov, después de que este comparara la situación del opositor Alexéi Navalni, encarcelado a su regreso a Rusia y víctima de un envenenamiento el pasado verano, con la de los políticos independentistas catalanes condenados por el procés. Dentro del propio Gobierno se ha tratado de disimular las salidas de Iglesias, interpretándolas como cosas que se dicen en la campaña electoral, en tanto Iglesias sigue una dinámica bien concreta, como cuando hace unos días, en una entrevista en la Sexta, comparó al fugado Carles Puigdemont exiliados republicanos durante el franquismo, sin que, pese a la polémica desatada se haya vuelto atrás.

Y es que, uno de sus miembros, desde su propio puesto en el Gobierno cuestiona que se aplique la Constitución y la Ley común a quienes cometen actos previstos en el Código Penal que, a su entender, deben sustraerse al conocimiento de los jueces o de las fuerzas y cuerpos de la Seguridad del Estado que son elementos ordinarios para aplicarla. Y si ben Sánchez se desmarcó de la comparación de Puigdemont con los exiliados republicanos, en el caso de la falta de calidad democrática en España, salvo la respuesta a los rusos de Laya y la discreta alusión de Ábalos a la calidad de nuestra democracia, otras voces del Gobierno han querido dejar la boutade de Iglesias en una cosa que se dice en campaña electoral. Pero Iglesias dijo lo que quiso decir y subray´que lo decía como vicepresidente del Gobierno. Ergo... @mundiario