El Congreso deroga la Ley Mordaza pese a la reticencia del Partido Popular

Congreso de los Diputados. / Facebook.
Congreso de los Diputados. / Facebook.

El poder legislativo aprobó esta medida impulsada en conjunto por el PSOE y Unidos Podemos y la abstención de Ciudadanos. El partido oficial fue el único que votó "no".

El Congreso deroga la Ley Mordaza pese a la reticencia del Partido Popular

El Congreso ha obtenido nuevos poderes de objeción sobre el Ejecutivo tras la votación del martes en la cámara legislativa, en la cual se oficializó que la llamada Ley Mordaza ha sido derogada. De esta forma los parlamentarios tendrán derecho a decirle sus verdades al Gobierno sobre la Ley de Seguridad Ciudadana y las reformas que la misma necesita. La votación fue prácticamente unánime salvo por Ciudadanos, que se abstuvo, y por Foro Asturias, que votó directamente no. El PSOE fue el principal valedor de esta iniciativa pese al "batirubillo" que causó Antonio Trevín, de sus filas, quien incluyó muertes en las carreteras, con Centros de Internamiento para Extranjeros, Código Penal Militar, niveles de delincuencia y obviamente la oposición en dicho texto.

Aquellos retales formaban un patchwork -según lo dicho por el convergente Sergi Miquel- que impulsó a los distintos grupos a presentar enmiendas rebotadas por los socialistas bajo el pretexto de que era imposible armar un texto a partir de ellas. Al final de cuentas, los cinco incisos de la moción obrera se votaron por separado. El primero de ellos, precisamente el de la Ley Mordaza recibió el visto bueno de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, PNV, ERC, Partit Democrata Català y Nueva Canarias. De esta forma todos han apuntado a iniciar las reformas del legado de Jorge Fernández Díaz en el Ministerio de Interior.

José Alberto Martín-Toledano, vocero del PP, ofreció una "mano tendida" para la mejora del texto en la última frase de su comparecencia, al igual que el ministro Juan Ignacio Zoigo, durante la interpelación de la semana pasada que abrió el camino para esta moción. La primera oración del portavoz indicó que "en España los derechos y libertades de los ciudadanos están garantizados". "Afortunadamente, no estamos en Cuba ni en Venezuela", dijo luego en tono irónico.

Trevín, en cambio se fue al discurso vehemente y aseguró que era la obligación del Congreso devolver a los ciudadanos la libertad que el Gobierno les quitó con su ley de Seguridad Ciudadana. ""Ustedes creen que una sociedad segura es una sociedad silenciada", achacó el socialista al PP.

Por su parte, el vocero de Unidos Podemos, Eduardo Santos Itoiz, achacó a Trevín la forma en la que ha desarrollado su punto pues la comparó con una canasta en la que fue metiendo todo a la fuerza. No obstante, se mostró partidario de superar el concepto de "orden público" que representa la ley que está siendo derrogada. "La seguridad son los tres millones de pobres que no llegan a fin de mes, la gente que no sabe si va a poder llevar a sus hijos al colegio o si va a ser desahuciada. Todo eso genera intranquilidad y esa intranquilidad genera una insurgencia", dijo Santos. El PP se mantiene en su porra a la calle, por lo que podría presentar a la Cámara un texto con un concepto nuevo de seguridad.

Salvador García, portavoz de Ciudadanos, ha echado la responsabilidad de este tipo de decisiones al Tribunal Contitucional, aunque de cualquier forma su partido se abstendrá y garantizará así el triunfo de la moción del PSOE.

"Apoyaremos por dignidad, decencia, memoria y sentido democrático la derogación de esta canallada, de esta purga, de esta ley, y el cierre inmediato de los CIE de la vergüenza. La lucha sigue", dijo por su parte Gabriel Rufián, de ERC.

Si bien esta aprobación no modifica directamente la ley, sí que abre paso para su reforma de acuerdo a la oposición. Junto a la limitación de derechos expuetos por diversos partidos, la moción de los obreros pone la papa caliente en las "devoluciones en caliente" que el texto consagra o en la limitación del derecho de huelga y representación oficial.

Partiendo de ahí, el vocero del PSOE ha enumerado diversas cuestiones que considera abundantes en la falta de seguridad que patrocina el PP: los CIE, esos infinitos caudales de conflicto: las cárceles, desabastecidos de material humano y físico; carreteras, con 33 muertos más que a estas mismas alturas el año pasado; Fuerzas de Seguridad, las cuales han bajado en número este año; así como los recortes de derechos y libertades de los miembros de la Guardia Civil. Isidro Martínez, de Foro Asturias, admite que todo eso termina haciendo inevitable el apoyo al PSOE.@hmorales_gt

 

Comentarios