La Casa Blanca estudia la posibilidad de que la cuenta de Twitter de Trump sea supervisada
La administración del presidente de Estados unidos está considerando que los tuits del mandatario sean supervisados por abogados antes de ser publicados en la red social.
Twitter es el diario público de Donald Trump. El polémico presidente de los Estados Unidos ha utilizado la plataforma para compartir con sus seguidores cualquier cosa que pasa por su cabeza y en más de una ocasión se ha visto envuelto en problemas debido a sus tuits sin censura. Sin embargo, esto podría llegar a su fin pronto. Según The Wall Street Journal, la Casa Blanca está estudiando la posibilidad de poner en manos de abogados la supervisión previa de cada uno de los mensajes de Trump en la red social.
La información del mencionado periódico, cita a varios funcionarios y asesores bajo la condición de anonimato y apunta que los abogados "decidirían si alguno (de los tuits) necesita ser ajustado o moderado". La intención es crear un sistema en el que los tuits "no salgan de la mente del presidente al mundo", según uno de esos funcionarios.
Tuit de Donald Trump al ser proclamado como presidente de los Estados Unidos. / Twitter
Trump ha recibido fuertes críticas producto de sus manejos en las redes sociales. En abril de este año la propia empresa Twitter presentó una demanda ante la Administración del presidente, por intentar revelar información sobre la cuenta de un usuario crítico al gobierno del republicano.
Así mismo, han existido publicaciones muy polémicas de parte del mandatario, como cuando sugirió que su antecesor, Barack Obama, espió sus comunicaciones o cuando amenazó al exdirector del FBI James Comey con haber grabado sus reuniones con él.
Tuit de Donald Trump contra James Comey. / Twitter
Mientras Donald Trump sigue lidiando con las investigaciones sobre sus supuestos vínculos con el gobierno ruso, su administración también está estudiando la posibilidad de cambios en su equipo. Este caos en las redes de comunicación del Presidente ha causado que existan fuertes rumores sobre el cambio del vocero oficial de la Casa Blanca, Sean Spicer.