Cabo Verde decide extraditar a EE UU a Alex Saab, presunto testaferro de Nicolás Maduro

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El presidente (de facto) de Venezuela, Nicolás Maduro, y su presunto testaferro, el empresario colombiano Alex Saab. / elespectador.com
Este hecho es clave porque podría tener un efecto directo en la conexión Gobierno-Fuerza Armada, es decir, un eventual jaque a la permanencia del jefe del régimen en el poder en Venezuela. 
Cabo Verde decide extraditar a EE UU a Alex Saab, presunto testaferro de Nicolás Maduro

El régimen chavista ha recibido un duro golpe. La crisis de Venezuela adquiere cada vez más una proyección internacional por los cabos sueltos que conforman el complejo rompecabezas del sistema de poder con el cual su autoritario régimen socialista mantiene el control territorial, militar y político del país a pesar de la extrema crisis económica y social que arropa a los venezolanos.

Así como Washington, la Unión Europea y el líder opositor Juan Guaidó son piezas clave de este juego de poder donde prácticamente todos los espacios políticos del Estado venezolano se han duplicado por la fuerza con la que el chavismo detenta el control del Gobierno, y la presión que busca inducir el simbólico Gobierno interino de Guaidó para sacarlo de la Presidencia, otro elemento de esta dinámica política  es el operador financiero de la cúpula de poder del régimen de Maduro. 


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Y es que el Tribunal de Apelación de Cabo Verde encargado de dirimir la investigación contra Alex Saab, un empresario colombiano que presuntamente funge como el testaferro del presidente (de facto) de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó este lunes su extradición a Estados Unidos. 

Esto implica que el jefe del régimen militarista que controla el país sudamericano ha perdido a un importante aliado, pues Saab maniobraba con los capitales del chavismo para depositarlos en sus cuentas domiciliadas en Colombia, Estados Unidos y Suiza, así como en otros paraísos fiscales donde almacenaba una parte de los fondos público que los altos funcionarios de la cúpula de Maduro desfalcaron del Estado venezolano antes de que arreciaran las sanciones individuales de Washington bajo la Administración de Donald Trump.

El empresario colombiano fue detenido en junio al hacer escala en el archipiélago africano (Cabo Verde) por una orden de búsqueda y captura que pesaba en su contra emitida desde la Interpol (la Policía Internacional). 

Una pieza clave en el rompecabezas de la crisis venezolana

Por lo tanto, ante la magnitud del caso, por tratarse de una figura de alta responsabilidad en la gestión financiera del régimen venezolano para alimentar sus monopolios internos y tras haber estado involucrado en una trama de corrupción con las importaciones a sobreprecios de alimentos subsidiados desde México para su distribución a las comunidades pobres de Venezuela, Saab podría ser obligado a declarar ante la justicia estadounidense y revelar las estrategias con las que ha ocultado miles de millones de dólares y de euros que el régimen de Maduro mueve fuera del país para evadir los dineros de sus jerarcas de las sanciones de la Casa Blanca, es decir, las riquezas malversadas de Nicolás Maduro, la vicepresidenta Delcy Rodríguez, el ministro de Economía Tareck El Aissami y el ministro de Defensa Vladimir Padrino López.

Washington, que acusa a Saab de ser el principal operador financiero del chavismo, pues moviliza los capitales de Maduro y compañía de una cuenta a otra en bancos que no están sometidos a las sanciones del Departamento del Tesoro, lo ha buscado y perseguido durante los casi cuatro años de la Administración de Donald Trump, hasta que finalmente solicitó la extradición porque lo considera una pieza clave en su estrategia para forzar un cambio político en Venezuela.

¿Cómo la caída de Saab podría perjudicar al régimen de Maduro?

Esto se debe a que Saab es mucho más que un empresario. Ha sido designado por Caracas como un “enviado especial” o una suerte de agente diplomático de Venezuela en África, presuntamente, como embajador del país ante la Comunidad Africana de Naciones, pero en realidad la función del colombiano va más allá; presuntamente, Saab almacena una parte de los capitales ilegales del régimen de Maduro en bancos de países africanos o malversa los fondos para ejecutar operaciones de lavado de dinero ante el patrimonio de más de 100.000 millones de dólares que los funcionarios chavistas de más alto rango poseen fuera de Venezuela tras desfalcar las riquezas del Estado durante los siete años que lleva el Gobierno de Maduro. 

Para Estados Unidos, obligar a Saab a confesar esa y otras maniobras es fundamental para que la arquitectura financiera del chavismo se venga abajo y entonces Maduro no tenga capacidad para distribuir rentas al sector militar que lo mantiene en el poder bajo la coacción y el control del monopolio de las armas.

La decisión de la extradición del testaferro ha sido difundida a través de un comunicado distribuido por correo electrónico por el equipo habitual de comunicación de la defensa, que fue asumida por el despacho del exjuez español Baltasar Garzón. Los abogados de Saab, señala el bufete, “recurrirán la decisión del tribunal y acudirán a la Corte Suprema de Cabo Verde”. Es decir, la sentencia aún no es firme y los abogados del empresario colombiano tratarán de apelarla, aunque la posible entrega de Cabo Verde a las autoridades estadounidenses amenaza con poner en jaque el complejo entramado de negocios del régimen bolivariano.

Entretanto, el Gobierno venezolano sigue defendiendo a su protegido a capa y espada, ya sea por temor de un posible desplome político-financiero o para iniciar otra escalada de tensiones con Washington. Caracas lo considera un “operador oficial”. Maduro se refirió a él primero como “enviado especial” y la semana pasada lo nombró embajador extraordinario ante la Unión Africana. El canciller del régimen venezolano, Jorge Arreaza, denunció públicamente que Saab sufrió “torturas” y “violaciones de sus derechos humanos”.

Quien fuera hasta hace poco un desconocido empresario, hoy es la figura que podría declarar en contra de su jefe financiero y del político con el cual ha formado su imperio personal de riquezas mal habidas, Nicolás Maduro, lo que tendría un efecto directo en la conexión Gobierno-Fuerza Armada, es decir, un eventual jaque a la permanencia del líder chavista en el poder. @mundiario

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