Análisis del golpe de Estado en Egipto: ¿El fin justifica los medios?

El ya expresidente Morsi.
El ya expresidente Morsi.
Quizás sea cierto que Morsi no ha cumplido el programa electoral y que por tanto está en deuda con sus votantes, pero ¿esto justifica un golpe de Estado?, se pregunta este analista de MUNDIARIO.
Análisis del golpe de Estado en Egipto: ¿El fin justifica los medios?

En junio de 2012, y tras la famosa Primavera Árabe, Mohamed Morsi, candidato de los Hermanos Musulmanes al gobierno egipcio gana las elecciones presidenciales en Egipto. Como todos ustedes saben, los Hermanos Musulmanes son una organización islamista, por lo que en ideario está basado en el Islam. Esto era evidente antes de producirse las elecciones, y aún así lograron alzarse con el poder. Quizá esto no ha gustado demasiado en Occidente. Tras un año en el poder y tras gravísimos problemas de toda índole se produce un Golpe de Estado militar. Quizás sea cierto que Morsi no ha cumplido el programa electoral y que por tanto está en deuda con sus votantes, pero ¿esto justifica un golpe de estado?

En Europa, y en América, hemos visto esto varias veces. No hay más que buscar en Google "promesas incumplidas" y obtendremos un listado casi infinito. Incluso lo podemos seleccionar por países. Quizá por eso ha sorprendido la tibieza de la Unión Europea y Estados Unidos. No se ha condenado el Golpe contra un gobierno democrático. Y en caso de hacerse se ha justificado. Esto nos lleva a una conclusión: La Democracia como la conocemos es mentira, puesto que cuando no interesa el gobierno saliente de las urnas, puede derrocarse mediante la fuerza militar. Todos son muy demócratas hasta que su partido pierde.

Aunque todo el mundo se la atribuye, en realidad Nicolás Maquiavelo jamás pronunció la frase de "El fin justifica los medios". Esto es lo que ha permitido Occidente. No les gusta un gobierno islamista y permite un Golpe de Estado en un país democrático. Evidentemente no soy partidario de un gobierno islamista, pero si se ha elegido democráticamente, ¿no hay otras fórmulas menos cruentas para derrocarlo? Tengan presente que han fallecido muchas personas ya, y me temo que morirá alguna más en Egipto por los disturbios. A partir de ahora, ¿quién decide qué partidos pueden presentarse a unas elecciones? Y no olviden lo más importante: todo esto puede crear precedentes peligrosos. O lo que es igual de temible, alguien puede justificar una guerra civil. Da pavor todo.

Piensen. Sean buenos.

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