La discreción de Alfonso Rueda no impide ver su opción a un posible relevo de Feijóo

Alfonso Rueda.
Alfonso Rueda.
Alberto Núñez Feijóo, más pronto que tarde, se irá y el PP de Galicia podría quedar resguardado con un pontevedrés, Alfonso Rueda, llamado a construir un proyecto del siglo XXI.
La discreción de Alfonso Rueda no impide ver su opción a un posible relevo de Feijóo

Tardará más o menos. Más de lo que muchos quisieran y menos de lo que muchos se imaginan en sustituir a su jefe, Alberto Núñez Feijóo. Hablamos de Alfonso Rueda, licenciado en Derecho e hijo del político popular José Antonio Rueda Crespo, ya fallecido. Se inició en la política en las nuevas generaciones del Partido Popular de Galicia, siendo elegido en 1993 presidente de dicha organización en Pontevedra. Fue jefe de gabinete del conselleiro Xesús Palmou y director general de Administración Local de la Xunta de Galicia entre los años 2000 y 2005.

Vale más por lo que calla que por lo que cuenta, mide sus intervenciones con inusual habilidad y desmedido celo. Tal vez sea del único político del que por lo menos la que firma no conoce una sola irregularidad, modelo en sus formas y en su vida, es el ejemplo positivo del Partido Popular de Galicia.

Desde la elección de Nuñez Feijóo como presidente de su partido, Rueda se encargó de la secretaría general en Galicia, concurriendo a las elecciones gallegas de 2009 en la candidatura electoral de la provincia de Pontevedra. Obtuvo un escaño y fue designado posteriormente conselleiro de Presidencia, Administraciones Públicas y Justicia en abril de ese mismo año.

Tras la segunda victoria electoral de Feijóo en las elecciones autonómicas de 2012, mantiene su cargo de conselleiro asumiendo también el rango de vicepresidente. Movimiento éste que en política se considera un premio y una posible decisión de relevo cuando toque... Sabedor de ello, Rueda no se inmuta, trabaja y está siempre donde se le espera, característica principal de todos los políticos aspirantes a grandes cosas. En su mente están, sin duda, unos cambios necesarios para hacer de Galicia lo que él sueña, pero nadie los conoce. No toca. En segundo plano ejerce un férreo control del aparato del PPdeG. El presidente Feijóo, más pronto que tarde, terminará en Madrid -o en otro destino- y el PP de Galicia podría quedar resguardado con un pontevedrés, Alfonso Rueda, llamado a construir un proyecto político del siglo XXI. @mundiario

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