Los afines a íñigo Errejón podrían precipitar la renuncia de Pablo Iglesias

Pablo Iglesias, secretario general de Podemos.
Pablo Iglesias, secretario general de Podemos.

El todavía secretario general y su segundo están envueltos en una inagotable disputa por imponer su voluntad. Iglesias promete presentar su dimisión si Errejón le supera en aceptación interna.

Los afines a íñigo Errejón podrían precipitar la renuncia de Pablo Iglesias

Pablo Iglesias no está dispuesto a que nadie le diga qué hacer ni le discuta sus planes. El secretario general de Unidos Podemos tiene bastante claro que el sector afín a íñigo Errejón se está alzando contra el suyo, por lo que ha advertido que renunciará a su puesto si al final se ve superado por el bando contrario en los órganos dirigenciales del partido.

Desde hace ya poco más de un mes, los morados están partidos en dos en su búsqueda por encontrarse a sí mismos. La búsqueda ha desatado un fuego cruzado entre quienes apoyan el proyecto de Iglesias y quienes apoyan el de Errejón, todo a un mes de su segunda Asamblea Estatal en Vistalegre, que de paso será el tercer aniversario de la agrupación.

El viernes último, los dos grandes caciques del partido hicieron públicos sus documentos políticos. Tienen hasta el 2 de febrero para intercambiar documentos y negociar las listas, pues ese es el día en que se presentarán las candidaturas para la secretaría general y el Consejo Ciudadano Estatal.

De momento Pablo Iglesias es el único aspirante a la secretaría general que ya ocupa, por lo tanto la amenaza yace en la lista para el Consejo Ciudadano Estatal que estaría preparando Errejón desde ya. En caso de que esa lista consiga más apoyos que la que el mismo Iglesias tiene planeada, el gran líder del partido renunciaría a su posición y escaño.

Su renuncia dejaría acéfalo al partido por un buen tiempo y, encima, haría perder el norte a quienes abogan por el espacio político al que dan vida Unidos Podemos y las confluencias, una apuesta defendida por Alberto Garzón, mandamás de Izquierda Unida. Errejón, en cambio, prefiere que las sociedades se queden solo para ocasiones electorales.

Toma de decisiones

En el documento presentado, el secretario general evoca dos momentos importantes del año pasado: haber dicho no a la alianza que presentaron el PSOE y Ciudadanos, y haber pactado una alianza propia con IU. Iglesias recuerda que ambas decisiones llevaron al partido a convocar a una consulta a la militancia ante la negativa de una buena parte de la cúpula directiva. "Esas diferencias políticas que enfrentaban no solo a compañeros (sino a aparatos con amplias estructuras de profesionales liberados) pudieron salvarse en los momentos más difíciles gracias a la intervención de los inscritos que, mediante su participación en diversas consultas, determinaron dos rutas estratégicas cruciales: no apoyar el acuerdo de gobierno del PSOE con Ciudadanos y concurrir a las elecciones generales en confluencia con IU y EQUO en el conjunto del Estado -aparte de Galicia y Cataluña-", escribió.

Errejón se saltó el proceder del partido ante el proyecto de socialistas y C's. Respecto a la alianza con Izquierda Unida, el segundo de Podemos no se retractó de su por demás conocido descontento y aseguró que la misma "no parecio funcionar" para los comicios del verano pasado. La idea del jefe de la secretaría política es que Podemos siga siendo una entidad autónoma sin menospreciar alianzas importantes para tiempos de elecciones. "Sentimos una especial satisfacción por la constitución de espacios políticos diferenciados y de carácter plurinacional en los territorios con dinámicas nacionales propias como en Catalunya, País Valencia, Baleares y Galicia. Estamos seguros de que podremos llegar a nuevas alianzas electorales con fuerzas como IU en el futuro pero estos acuerdos se decidirán en función de las circunstancias por el poder soberano en Podemos, esto es, por los y las inscritas", presentó en su documento. @hmorales_gt

 

ADVERTISEMENT
 
 

 

 

 

Comentarios