Las 5 decisiones equivocadas que le han costado a May su mayoría parlamentaria

Theresa May durante la campaña. / RRSS
Theresa May durante la campaña. / RRSS

Theresa May convocó una elección cuando no tenía necesidad de hacerlo, apostando que iba a derrotar al Partido Laborista antes de comenzar las negociaciones del Brexit con la UE.

Las 5 decisiones equivocadas que le han costado a May su mayoría parlamentaria

1. Políticas equivocadas

 

El predecesor de May, David Cameron, habló sobre "rodar el terreno de juego", usando el término del críquet en una metáfora de preparar el terreno antes de las campañas electorales. En lugar de eso, la pieza central del manifiesto conservador, fue tapar el agujero negro de financiamiento para el cuidado social, haciendo que la gente pague la factura después de su muerte al recurrir a cualquier activo que tienen más de £100,000. Algo que no rodó el terreno para muchos británicos. 

A menos que las grandes ideas sobre políticas se introduzcan gradualmente a las personas, las reacciones tienden a ser muy fuertes, algo que ha quedado probado en este caso. 

2. Una líder, pero no una política hábil

 

Theresa May estaba destinada a ser la carta de triunfo de los conservadores, pero demostró que preferiría estar en cualquier otro lugar que tras el rastro de la campaña, siempre lució parecían insegura. La súbita decisión de los conservadores de dirigir una campaña requería de una persona preparada para la máxima tensión. Cualquier persona con un "mínimo de objetividad" habría entendido que May no era una política carismática tradicional. A May le cuesta conectar con las masas. 

3. Un equipo muy pequeño

 

May prefiere confiar en un pequeño círculo de asesores cercanos. A toro pasado, ella debería haber sido más abierta e invitar a otros talentos dentro del partido. Cuando las cosas salieron mal, de pronto ella también se encontraba sola por la misma razón. 

Cuando se es líder, es muy sencillo desarrollar una camarilla, pero es muy peligroso hacer eso cuando se está ejecutando una campaña política, no se puede permitir el lujo de perder el contacto con el público, o con las bases del propio partido. 

4. Mensajes mixtos

 

El manifiesto de May sugería que el partido estaba buscando la lealtad de los votantes de la clase obrera que percibe los ingresos más bajos. Pero su decisión de renovar ese manifiesto de tal manera que no llegaba a ofrecer en realidad nada a este importante segmento del electorado, demostró más aún, que la actual primera ministra todavía era en muchos sentidos una conservadora tradicional.

5. Una estrategia regional deficiente

 

Los altos cargos cercanos al gobierno de Cameron apuntan a su operación regional en asientos marginales como una clave para el éxito en las elecciones de 2015. El partido preparó el terreno con varias medidas financieras en el período previo a las elecciones, tales como financiamiento para proyectos de infraestructura, mejoras de carreteras, y un ferrocarril, lo que significa que Cameron tenía algo de sustancia para hablar cuando era entrevistado por los medios regionales.

Por el contrario, May tuvo poco que decir a los medios de comunicación regionales, que desempeñan un papel clave en llegar a los votantes que no prestan mucha atención a la política a nivel nacional. Sus entrevistas a este tipo de medios recibieron muy poca atención durante la campaña por la falta de sustancia en ellas. 

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