26-M: El eje ciudadanos - gobernantes alcanza su máxima perfección en la política local

Palacio Municipal de A Coruña en la plaza de María Pita.
Palacio Municipal de A Coruña en la plaza de María Pita.

A partir de este lunes 27 de mayo, con el inicio de los movimientos para la formación de gobiernos locales para los próximos 4 años, es importante que tengan en cuenta el futuro de la administración: íntegra y transparente, eficaz y eficiente, tecnológica y a la vanguardia.

26-M: El eje ciudadanos - gobernantes alcanza su máxima perfección en la política local

Este domingo, 26 de mayo, se celebran elecciones locales. Y europeas, y en algunos casos, autonómicas, apenas en un mes tras las elecciones generales del 28 de abril. Pero de todas estas convocatorias, sin duda, la llamada a las urnas para la elección de alcaldes y alcaldesas y de los equipos que, a lo largo de los próximos cuatro años gestionarán sus intereses, es la que genera mayor interés por parte de la ciudadanía, y eso ¿por qué?.

Pues porque los ayuntamientos son, sin duda, la administración más próxima a los ciudadanos, aquélla a la que acuden para resolver sus problemas, sean o de competencia municipal. En los ayuntamientos es donde cobra mayor sentido el principio básico de la democracia representativa, donde los ciudadanos sienten la proximidad de sus representantes políticos en múltiples dimensiones. Acuden a los plenos, interactúan directamente con los responsables sin demasiados filtros y llevan a cabo auténticos ejercicios de rendición de cuentas en plena calle.

Porque los ayuntamientos son cauces inmediatos de participación ciudadana en los asuntos públicos, no lo digo yo, así define a los municipios la propia norma que los regula, de ahí precisamente la importancia de contar con buenos representantes políticos y buenos gestores, que se extrema en el ámbito local, donde por la propia dimensión de la planta local, los equipos de gobierno no cuentan, en ocasiones, con los medios y recursos necesarios para el mejor ejercicio de sus funciones.

No debemos olvidar que los ayuntamientos prestan un gran número de servicios básicos a la ciudadanía, servicios como la gestión de residuos, el abastecimiento de agua, el saneamiento, el alumbrado público o la pavimentación de los viales, y los muy importantes servicios de bienestar social, tras la fracasada reforma local de 2013, entre otros. No es poca cosa. Por ello, los vecinos percibirán a lo largo de los próximos 4 años el impacto diario de la gestión local en su vida, en el desarrollo cotidiano de sus labores, por lo que deben ser conscientes de los retos a los que los futuros gobernantes se enfrentan. Retos que no son pocos. Un simple vistazo a las calles de pueblos y ciudades de toda España permite advertir la transformación que unos y otros han experimentado, como consecuencia de la acción (y los presupuestos) de los gobiernos y administraciones locales.

Más allá de fenómenos de desarrollo puntual, como las smart city, se ha pasado de los tradicionales servicios básicos a incrementar exponencialmente su cartera de servicios no sólo a los de carácter tecnológico, sino también acogiendo las demandas derivadas de la evolución de la sociedad y ofreciendo mayores estándares de calidad de vida al conjunto de la sociedad.

En un momento de transformación de las relaciones entre la ciudadanía y los gobiernos, en todos los niveles territoriales, pero con mayor intensidad en el local, en el que las políticas públicas experimentan el vértigo de las nuevas tecnologías, las demandas ciudadanas de transparencia y accountability y el reto de avanzar sin descuidar la senda de la estabilidad económico-presupuestaria, no debemos olvidarnos de la financiación local. Aunque en su génesis la reforma local de 2013 formulaba como uno de sus objetivos aprobar un nuevo sistema de financiación, hasta el punto de que se llegaron a condicionar normativamente gran parte de sus previsiones más controvertidas, como las relativas a los servicios sociales o educación, a ese hipotético nuevo marco, el tiempo transcurrido y el elocuente silencio alrededor de este tema no permiten albergar esperanzas de que sea, en estos momentos, una prioridad de legislatura, no lo fue en la campaña a las elecciones generales.

El eje ciudadanos-gobernantes alcanza su máxima perfección en la política local, cuya proximidad y subsidiariedad les convierte en el exponente máximo de nuestra democracia, por ello a partir del lunes 27 de mayo, con el inicio de los movimientos para la formación de gobiernos locales para los próximos 4 años, es importante que tengan en cuenta el futuro de la administración: íntegra y transparente, eficaz y eficiente, tecnológica y a la vanguardia para estar a la altura de los avances que ya presiden la vida de los ciudadanos en sus relaciones con el sector privado. @mundiario

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