Donde los cojones se tocan

Cojines grandes que se tocan. / Westwing
Cojines grandes que se tocan. / Westwing

Experimentando ciertas nociones chomskianas sobre la generación de la gramática, pregunté a mi hijo de dos años cómo se llamaría un cojín muy pero que muy grande.

Donde los cojones se tocan

Estos Significados inéditos reparan en algunos de los apetitos de la voluntad, como el afán por utilizar la lengua como arma identitaria, la codicia o el deseo de fumarse un puro. Y lo hacen mientras, ociosos nosotros, nos tomamos un té entre los mullidos cojines de una habitación climatizada.       

climatizar. (de clima + atizar). Atizar al clima, avivando especialmente la temperatura y produciendo un calentamiento global. Hoy podemos disfrutar de una atmósfera climatizada gracias principalmente a las emisiones de dióxido de carbono procedentes de la quema de combustibles fósiles.

clientela. (de cliente + tela). Específicamente, conjunto de clientes de una tienda de tejidos. La clientela nunca acude a las tiendas de ropa confeccionada; la prefiere hecha a medida.

clonación. (de clonar + nación). Acción y efecto de producir naciones con los mismos genes identitarios. Si hablar una lengua común es la esencia de la identidad nacional, por encima de las creencias y tradiciones, la clonación puede llevarse a cabo imponiendo a pueblos distintos la misma lengua.

clónico. (de clon). Respecto de un individuo, otro igual de payaso que él.

cobrar1. (de cobrar + obra). Percibir un albañil o empresa de construcción algún dinero por realizar una obra.

cobrar2. (de cobrar). prnl. Causar víctimas una cobra. Las mordeduras de serpientes matan aproximadamente a 100.000 personas al año.

cochambre. (de coche + hambre). Hambre de tener un coche, cuando por tener el coche luego se tiene que pasar hambre.

cochino1. (de coche + chino). Coche fabricado en China. Particularmente, aquel destinado al mercado interior y cuyo diseño con frecuencia es una copia burda y descarada de algún modelo occidental, con deficiente calidad y peores niveles de seguridad. 

cochino2. (de cochino + coche). Coche sucio e indecoroso. De esos en cuyas lunas algún dedo acusador acostumbra a escribir: "Guarro, lávalo".

cociente. (de cocer). Que cuece. El resultado de poner agua al fuego se puede decir que es un cociente.

codiciar1. (de códice). Ambicionar la posesión de códices. No sabemos si por ambición, aunque más bien pareció por despecho o venganza, el 4 de julio de 2011 Manuel Fernández Castiñeiras -que había sido electricista de la Catedral de Santiago de Compostela durante más de veinte años- robó de su archivo el Códice Calixtino, un manuscrito del s. XII de incalculable valor considerado como la primera guía para los peregrinos. Los primeros informes policiales barajaban la hipótesis de un posible robo por encargo de un coleccionista multimillonario o de una acción planeada por una banda de ladrones de arte que quisiera colocarlo en el mercado negro, donde su cotización podía haber alcanzado los 10 millones de euros. Pero los hechos que se fueron desvelando apuntaron más bajo, al submundo rastrero de las pasiones. Casualmente -y hoy sabemos que también causalmente- no hacía mucho que Castiñeiras había sido despedido sin que se le pagaran los 40.000 euros que reclamaba de indemnización. Quiso entonces vengarse llevándose el Códice porque sabía que ese era el golpe más duro que podía asestarle al deán, José María Díaz, con el que había mantenido algo más que una estrecha amistad.

codiciar2. (de codo). Desear desmedidamente hablar por los codos, empinar el codo o hincar los codos. Por tanto, la locuacidad, la propensión a beber alcohol y la dedicación superlativa al estudio son las tres principales manifestaciones de la codicia.

cohibir. (de cohibir + Cohiba). Reprimir los deseos de fumarse una clase especial de puros habanos, los Cohiba, probablemente los mejores del mundo. De este modo, si no fumas evitas el riesgo de estar cohibido.

coincidir. (de coincidir + coin, moneda). angl. Encontrarse accidentalmente varias monedas en un monedero. Las afortunadas coincidencias están en función del valor de las monedas.

cojinete. (de cojo + jinete). Jinete cojo. Peor sería que lo estuviera el caballo.

cojón. (aument. de cojín). Cojín muy grande. Lo supe por mi hijo Héctor, a quien cuando tenía dos años pregunté -abusando de su ingenuidad y pretendiendo experimentar ciertas nociones chomskianas sobre la generación de la gramática- cómo se llamaría un cojín muy pero que muy grande. Y desde una lógica apabullante dio con esa respuesta. A partir de ahí, no puedo desligar en mi mente la expresión “estar tocándose los cojones” del hecho de estar pegados uno al otro en un salón, aguardando a que llegues, dos o más cojines muy grandes. @mundiario

Donde los cojones se tocan
Comentarios