Una mirada al futuro
Al margen de que todos tendemos a mitificar el pasado a nuestro modo, es cada día más evidente que Espa&nt
Al margen de que todos tendemos a mitificar el pasado a nuestro modo, es cada día más evidente que España echa de menos el espíritu de la Transición y el discurso de los políticos de entonces. Salta a la vista que aquel período de la historia de España se cerró con buenos resultados, producto del consenso político y de la generosidad de mucha gente, pero no lo es menos que también en aquellos años había tensión, discrepancias, terrorismo y un sinfín de problemas económicos y sociales.
Por fortuna para todos, la situación de la España de hoy es mucho mejor en términos socioeconómicos, por muy negativa que resulte a veces la crispada situación política. Como estos días se ha evocado ya mucho el discurso de los líderes de la Transición, muy dados por cierto a mirar atrás contando sus batallas, puede venir bien echar mano de un observador de aquel entonces, que también lo es de la España de hoy y que mira al futuro. Frente a tantos tópicos, el periodista y analista político Fernando Jáuregui ha escrito algo que, cuando menos, invita a la reflexión.
Jáuregui concluye que de todos los pactos posibles y necesarios entre el Gobierno central, la oposición y, por qué no, algunos partidos nacionalistas e Izquierda Unida, el más importante es el del desbloqueo de la democracia española. Todo un reto, sin duda, para una clase política venida a menos -más vale no comparar los políticos de la Transición con los de ahora-, ya que no todo el debate debe agotarse en torno a lo que haga o diga ETA, como si la banda armada fuese el árbitro supremo de la vida política española. Y esto último también es obra del pensamiento de Jáuregui, en una muestra más de que los políticos de entonces se fueron o perdieron su posición, mientras que sigue habiendo periodistas de los setenta muy en forma en un nuevo siglo de una España que no merece tanta mediocridad.
Por fortuna para todos, la situación de la España de hoy es mucho mejor en términos socioeconómicos, por muy negativa que resulte a veces la crispada situación política. Como estos días se ha evocado ya mucho el discurso de los líderes de la Transición, muy dados por cierto a mirar atrás contando sus batallas, puede venir bien echar mano de un observador de aquel entonces, que también lo es de la España de hoy y que mira al futuro. Frente a tantos tópicos, el periodista y analista político Fernando Jáuregui ha escrito algo que, cuando menos, invita a la reflexión.
Jáuregui concluye que de todos los pactos posibles y necesarios entre el Gobierno central, la oposición y, por qué no, algunos partidos nacionalistas e Izquierda Unida, el más importante es el del desbloqueo de la democracia española. Todo un reto, sin duda, para una clase política venida a menos -más vale no comparar los políticos de la Transición con los de ahora-, ya que no todo el debate debe agotarse en torno a lo que haga o diga ETA, como si la banda armada fuese el árbitro supremo de la vida política española. Y esto último también es obra del pensamiento de Jáuregui, en una muestra más de que los políticos de entonces se fueron o perdieron su posición, mientras que sigue habiendo periodistas de los setenta muy en forma en un nuevo siglo de una España que no merece tanta mediocridad.