Iznate: peculiar domingo de Resurrección
Iznate es una sencilla localidad de la Axarquía malagueña a ocho kilómetros de la carretera en medio de la naturaleza y entre cultivos de aguacate, mango y frutas tropicales, a media hora al este de Málaga, con casi mil habitantes, cerca de la población de Benamocarra.
Un pueblo dedicado de toda la vida a la uva pasa (de hecho, por el camino pueden ver algún pasero por la zona, la construcción donde se dejaban secar al sol la uva para convertirla en pasa) y el vino que se encuentra en la ruta del aguacate hoy en día. Y es que el tiempo modifica los gustos y, por tanto, las economías locales, mientras el campo ha ido cambiando el tipo de cultivos.
La Semana Santa aquí se compone de una procesión el Domingo de Ramos, el Martes una procesión de tronillos. Ya el Jueves Santo la Santa Misa de la Cena del Señor, con la procesión del Cristo y la Virgen de los Dolores. El Viernes la Pasión del Señor. Y el Sábado la Vigilia Pascual.
Tras esta ceremonia Iznate continua la jornada del Domingo de Resurrección con un arroz en la zona del Ayuntamiento, en el que participan tanto habitantes como turistas.
Muchos visitantes aprovechan este momento para conocer a sus gentes y sus calles, con bastantes cuestas, sin fuertes inclinaciones, ya que está construido sobre una loma. Aprovechando su vino y gastronomía mientras en medio de la naturaleza se disfruta de la tranquilidad.
Otra fiesta de interés de la localidad es la fiesta de la uva moscatel muy celebrada en Iznate, con comida típica de la localidad en sus calles.
Y comentar para los aficionados al camping que existe en la localidad. Para los senderistas, hay un par de rutas, una de ellas comenzando desde el mismo pueblo pasando por la Loma de Barcos, el río y terminando en el mismo pueblo.
Para una visita aparte de la mencionada Iglesia de San Gregorio VII, pueden ver la Fuente de los Tres Deseos, de origen árabe a la entrada del pueblo, la Fuente de la Moguera o Noguera, no se sabe bien porque cada uno lo llama de una forma diferente y, por último, la Fuente Blasonada en la Plaza de la Virgen.
