De cómo los videojuegos pueden ayudar a mejorar las funciones cerebrales

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Videojuegos. / El Estímulo

Un estudio ha revelado que este tipo de entretenimiento podría traer grandes beneficios a la materia gris del cerebro.

De cómo los videojuegos pueden ayudar a mejorar las funciones cerebrales

Los videojuegos han sido tachados de agentes nocivos para la salud durante mucho tiempo. Sin embargo, un nuevo estudio ha llegado para echar abajo esta creencia, y dejar que claro que, contrario a lo que muchos han defendido, este tipo de entretenimiento podría traer grandes beneficios a la materia gris del cerebro.

La investigación, desarrollada por la revista científica PLOS ONE, ha querido dar luz sobre los efectos positivos que el tipo de contenido, la dinámica y la mecánica de los juegos individuales pueden tener en nuestro órgano motor. El informe estuvo centrado en juegos reconocidos como el famoso Super Mario 64, por ejemplo.

Para comprobar su tesis, los investigadores pusieron en marcha un experimento en el que debían analizar a tres tipos de personas de mediana o avanzada edad: unos que han jugado a Super Mario 64, otros que han tocado el piano, y otros que no han hecho nada.

Los resultados fueron contundentes: aquellos que jugaron Super Mario 64 tuvieron un incremento de la cantidad de materia gris en las dos regiones del cerebro, mientras que los que tocaron piano no. En esa línea, los científicos han destacado que este aumento de materia gris en el hipocampo resulta tremendamente beneficioso para las acciones cerebrales relacionadas con la memoria.

Pero eso no es todo. El análisis sostiene que la acción de los videojuegos, además, podría estar relacionada con la mejora de las habilidades de atención, procesamiento cerebral y las funciones cognitivas. En ese sentido, la investigación detalla que los juegos de acción, caracterizados por el  movimiento rápido de objetivos que vienen y van, y que suelen tener una gran cantidad de desorden,  requieren que el usuario tome decisiones rápidas y precisas, lo cual termina produciendo impactos cognitivos positivos. Este fenómeno puede llegar a ser incluso más poderoso que los juegos mentales que se crean específicamente para mejorar la función cognitiva.

“Los videojuegos modernos se han convertido en experiencias sofisticadas que ejemplifican muchos principios conocidos por los psicólogos, neurólogos y educadores, que pueden ser fundamental para alterar el comportamiento, que producen el aprendizaje y la promoción de la plasticidad del cerebro”, exponen los autores del estudio. “Los videojuegos, por su propia naturaleza, implican formas predominantemente activas de aprendizaje, que es típicamente más efectiva que el aprendizaje pasivo“, concluyen. @mundiario