¿Sabías que comer frente a tu ordenador puede ser realmente peligroso para tu salud?

Comer frente al ordenador. Pexels.
Comer frente al ordenador. / Pexels.

En este artículo te contamos lo que dice la ciencia al respecto.

¿Sabías que comer frente a tu ordenador puede ser realmente peligroso para tu salud?

Sí, has leído bien: comer frente a tu ordenador puede ser más peligroso de lo que piensas. Así lo ha dejado claro una investigación desarrollada por la Universidad de la Ecología Humana, en Ucrania, que expone que solo nuestro teclado, mouse y mesa contienen 400 veces más bacterias que un baño.

Los científicos han detallado que “el campo electromagnético de la computadora destruye la estructura molecular del agua y la comida, haciéndolos nocivos para nuestra salud”.

Para llegar a esta conclusión, los expertos colocaron frente a una computadora una serie de alimentos y luego los analizaron. Los resultados fueron sorprendentes: la estructura molecular de los alimentos se había afectado de manera negativa, perdiendo propiedades e incluso llegando a provocar trastornos y enfermedades en el organismo.

Pero eso no es todo: comer frente al escritorio puede generar, además, sobrepeso. En ese sentido, una investigación firmada por The American Journal of Clinical Nutrition subraya que la alimentación es una actividad que debe concentrar todos nuestros sentidos.

La cuestión es sencilla: si comemos frente al ordenador estamos atentos a otras cosas y, en consecuencia, no mediremos las cantidades de alimentos y terminaremos comiendo más.

Para probar esta teoría, los expertos realizaron un experimento que les permitió demostrar que aquellos participantes que almorzaban mientras jugaban con el computador consumían más alimentos que quienes solo se enfocaron en su comida.

Por último, los expertos sostienen que la contaminación y las bacterias presentes en nuestro ambiente de trabajo pueden causar descompensaciones, enfermedades o malestares estomacales; y que los efectos negativos de los alimentos pueden desarrollar a largo plazo trastornos como la enfermedad de Alzheimer o Parkinson. @mundiario