¿Puede esta deficiencia de vitamina empeorar la demencia?
Caracterizado por síntomas como temblores, movimientos lentos y músculos rígidos, el Parkinson es un trastorno neurodegenerativo crónico, similar al Alzheimer y la demencia, que actualmente no tiene cura. Los investigadores siempre están buscando nuevas formas de tratar la causa raíz y los síntomas de esta enfermedad por lo que vale la pena prestar atención a un nuevo estudio que establece una fuerte conexión entre los niveles de vitamina D y el Parkinson.
¿Cuál es la conexión entre el Parkinson y la vitamina D?
Este estudio probó los niveles de vitamina D de 182 pacientes con enfermedad de Parkinson y los comparó con los niveles de vitamina D de 185 sujetos sanos de control. Los resultados, que fueron publicados en la revista Acta Neurologica Scandinavia, mostraron que los participantes con enfermedad de Parkinson tenían niveles significativamente más bajos de vitamina D. Los resultados también mostraron que los pacientes con niveles más bajos de vitamina D tenían más probabilidades de sufrir depresión, ansiedad, sueño problemas y caídas, que son otros síntomas comunes asociados con la enfermedad de Parkinson.
Entonces, ¿qué significa esto para las muchas personas con Parkinson? Como el autor principal del estudio, Chun Feny explicó: "Dado que varios síntomas no motores imponen una carga sobre las personas con enfermedad de Parkinson y sus cuidadores, la vitamina D podría ser una terapia adicional potencial para mejorar estos síntomas descuidados".
¿Necesitas un suplemento de vitamina D?
La vitamina D es una vitamina liposoluble que todos debemos tener para mantener una salud óptima. La vitamina D se encuentra en ciertos alimentos, como el pescado graso, el queso y las yemas de huevo, pero principalmente la obtenemos del sol, lo que desencadena la producción de vitamina D en nuestro cuerpo.
La vitamina D desempeña muchos papeles importantes en nuestra salud, incluido el mantenimiento de la integridad de nuestros huesos, la modulación del crecimiento celular, la reducción de la inflamación, el apoyo al sistema inmunitario y la promoción de la absorción de calcio. En otras palabras, es muy importante para nuestra salud en general y, como podemos ver en este estudio, también parece ser importante cuando se trata de la enfermedad de Parkinson. @mundiario
