Una nueva investigación encuentra una manera de predecir qué tan bien envejecerás

Cuando pensamos en el envejecimiento, quizás uno de los mayores problemas que enfrentan las personas a medida que envejecen es la fragilidad: piense en la debilidad muscular, la fatiga y la sensación de vulnerabilidad a los factores estresantes ambientales. Si bien no existe una definición clínica del término (hay una escala de fragilidad que puede seguir, que puede encontrar aquí), la mayoría de los expertos entienden la fragilidad como una disminución en la capacidad de recuperación de un individuo, desde la condición física hasta la visión y la audición, y hasta enfermedades crónicas e incluso depresión.

Ahora, los investigadores pueden haber encontrado una manera de predecir qué tan frágiles nos volveremos a medida que envejecemos. Las respuestas al envejecimiento saludable, argumentan, yacen en nuestra sangre.

¿Qué encontraron los investigadores?

Investigadores de la Universidad de Strathclyde en el Reino Unido analizaron muestras de sangre de 1.191 personas entre las edades de 56 y 84 y dieron seguimiento a 786 de los participantes cuatro años después. También analizaron moléculas en las muestras de la sangre de 1.200 personas mayores y evaluaron si había algún patrón dentro de estas muestras que pudieran asociar con la fragilidad.

Después de completar ambas medidas, pudieron encontrar un conjunto de 12 sustancias específicas producidas en el metabolismo que diferenciaban entre individuos frágiles y no frágiles. Entonces, si alguien contuviera estas 12 sustancias en su sangre, podría contener estos marcadores significativos de fragilidad en el futuro.

¿Por qué importa esto?

Antes de este estudio, se conocía muy poca información sobre los marcadores biológicos de la fragilidad, por lo que esta nueva investigación es innovadora si realmente puede predecir su alcance. Aún más intrigante, los investigadores afirman que podrían predecir potencialmente la fragilidad en personas tan jóvenes como de 20 o 30 años revisando su sangre.

"Creemos que esta evaluación es la primera de su tipo. Podría conducir a una comprensión mucho más profunda del proceso de envejecimiento y cómo desarrollar potencialmente estrategias de intervención para envejecer mal", afirma el autor principal del estudio Nicholas Rattray.

¿Qué sigue para esta investigación?

Aunque esta investigación se centra principalmente en el envejecimiento, es importante que pensemos también en la fragilidad en el contexto de la enfermedad. Predecir la fragilidad, por ejemplo, también podría ayudar a los médicos a determinar si el cuerpo de un paciente podría manejar un tratamiento intenso, como la quimioterapia. Si alguien estuviera predispuesto a la fragilidad, podría necesitar opciones más personalizadas para el tratamiento o, al menos, más atención clínica a medida que experimentan síntomas de disminución.

"Esta investigación ha abierto la puerta al desarrollo de formas de cuantificar de manera rápida y precisa la fragilidad y aplicar este conocimiento directamente dentro del entorno clínico", señala Rattray.

Si bien es emocionante que podamos predecir qué tan bien envejeceremos, también plantea la pregunta: si supieras que tienes un alto riesgo de deterioro físico, ¿te gustaría saber lo antes posible o permanecer felizmente ignorante?   @mundiario