La importancia de gestionar el contenido que hable sobre cualquier persona física o jurídica

Los bots -digamos malos - (esos programas informáticos creados para realizar acciones repetitivas) pueden utilizarse para enviar a través de redes sociales cierto tipo de información falsa de manera reiterada, tal y como se explicaba en un reciente artículo. Pero detrás de estas amenazas virtuales siempre hay personas físicas dispuestas a, entre otras cosas, acabar con la reputación de una personas o empresa, incluso estafar.

Un ejemplo reciente de este tipo de acciones lo encontramos en Colombia. Un empresario del país se percató de que existía un perfil falso suyo en WhatsApp, app a la que subían fotos de su Facebook. Con un jaqueo a su móvil consiguieron hacerse con su lista de contactos y llegar a estafar a tres de sus clientes a quienes les solicitaron dinero en nombre de este empresario.

Puede parecer un suceso de película, pero comienza a ser habitual encontrarse con situaciones similares debido al crecimiento constante e implacable de las redes sociales, blogs y foros. Por eso, existen empresas dedicada en exclusiva a, entre otras acciones, borrar el nombre de una persona física o de una empresa de cualquier red social, incluyendo, obviamente, aquellos perfiles falsos creados para desprestigiar a una persona o compañía.

“Es necesario gestionar el contenido que hable sobre cualquier persona física o jurídica, siempre que se genere un perjuicio, una injusticia, o cualquier situación que perjudique tu vida personal o profesional”, explican desde Eliminalia, una de esas empresas dedicadas a limpiar el honor en la red.

Por otro lado, hace unos meses que la red social Facebook comenzó a verificar los perfiles de aquellas personas que cuentan con grandes audiencias. Según la empresa, quieren asegurarse que el contenido que se comparte en Facebook sea auténtico y provenga de personas reales, acabando así con los bots o personas que se escudan tras un perfil falso.

"En el futuro, verificaremos la identidad de las personas que tienen un patrón de comportamiento no auténtico en Facebook y cuyas publicaciones comienzan a volverse virales rápidamente “, declaró Mark Zuckerberg, creador y fundador de Facebook.

A pesar de esta loable medida del gigante tecnológico, no ha podido acabar con las noticias falsas que en muchas ocasiones no afectan únicamente a sucesos políticos, sanitarios o económicos, por ejemplo, sino también a ámbitos de la esfera privada de personas o toma de decisiones empresariales. Es por ello tan importante atajar el problema directamente sin dejar que el veneno se extienda por la red acabando con reputaciones en poco tiempo.