He aquí una guía completa para usar bien las cápsulas de lavandería
No te quedes con las dudas al lavar tu ropa sucia con cápsulas de lavandería.
Las cápsulas de lavandería son uno de los mejores inventos de los últimos años, y es difícil convencernos de lo contrario. Las cápsulas no solo eliminan las molestias y el estrés del día de lavado, sino que son una alternativa más fácil, rápida y ordenada al detergente líquido.
Aún así, las cápsulas de lavandería vienen con sus propias instrucciones y pautas, y cuando se trata de calcular cuántas cápsulas necesitas por carga, las cosas pueden volverse un poco confusas. Sin embargo, no es tan intimidante como parece. A continuación, encontrarás una guía completa para usar las cápsulas de lavandería. Como siempre, las cosas pueden variar según la marca y la fórmula, así que asegúrate de revisar la etiqueta del producto para conocer los detalles.
¿Cómo funcionan las cápsulas de lavandería?
Las cápsulas de lavandería son pequeñas cápsulas de gel llenas de neutralizadores, abrillantadores ópticos e ingredientes que combaten las manchas, como tensioactivos, enzimas y polímeros. Entre el peso de la ropa y la fuerza de la presión del agua, la cápsula estalla una vez que comienza el ciclo de lavado. En general, las cápsulas de lavandería son seguras en todos los ámbitos en términos de temperatura del agua, ciclo de lavado y material de la prenda. También se pueden utilizar en lavadoras de alta eficiencia.
La mejor parte de las cápsulas de lavandería es que vienen predosificadas, por lo que nunca tendrás que preocuparte por verter la cantidad correcta de detergente líquido. Además, están empaquetadas en una película soluble. Solo toma todas las cápsulas que necesites, tíralas a la lavadora y listo: tu trabajo está hecho. Lo único que debes tener cuidado es usar la cantidad adecuada de cápsulas de lavado en cada carga.
¿Cuántas cápsulas de lavandería debes usar?
La primera orden del día es calcular el tamaño de la carga de ropa, ya que esto ayudará a determinar cuántas cápsulas necesitas. La forma más fácil de hacerlo es cargar la ropa en la lavadora y tomar una medida visual. Si el tambor está sólo medio lleno, es una carga media. Un tambor que está lleno hasta las tres cuartas partes es una carga grande. Si el tambor está al máximo de espacio, es una carga extra grande.
Ahora que conoces el tamaño de la carga, puedes calcular cuántas cápsulas necesitas. Cada carga tiene una dosis asignada basada en factores como qué tan sucios están los artículos, así como el tamaño de la carga. Se recomienda usar una cápsula de lavandería para cargas medianas, dos cápsulas para cargas grandes y extragrandes y tres cápsulas para cargas extragrandes (o ropa muy sucia). Las cargas extra extra grandes no son una ocurrencia típica, pero se pueden encontrar en lavadoras de carga frontal, que son mucho más grandes y generalmente se encuentran en cuartos de lavado compartidos en dormitorios y edificios de apartamentos.
Si tienes una carga de ropa o sábanas muy sucias (por ejemplo, ropa de gimnasia o toallas de playa), es posible que desees agregar una cápsula adicional para asegurarte de que toda la suciedad y el olor se eliminen por completo. Es importante usar la dosis correcta, ya que usar demasiadas cápsulas, o no las suficientes, puede provocar una eliminación deficiente de las manchas o una suciedad persistente.
¿Cómo se usan las cápsulas de lavandería?
El uso de cápsulas de lavandería es un proceso sencillo de cinco pasos. Esto es lo que debes hacer:
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Calcula el tamaño de la carga de la ropa para determinar la cantidad de cápsulas que necesitas.
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Con las manos secas, coloca la cápsula en el tambor de la máquina, no en el cajón del dispensador de detergente.
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Coloca toda la ropa sucia encima de la cápsula.
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Cierra la puerta del tambor.
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Selecciona el ciclo de lavado adecuado (normal, planchado permanente o delicado) y la temperatura del agua (fría, tibia o caliente).
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¡Disfruta de una ropa limpia con un olor fresco!
Recuerda, si bien las instrucciones y las pautas de carga son bastante estándar, las recomendaciones de uso pueden variar según la marca y la fórmula, así que asegúrate de leer la etiqueta del producto solo para estar seguro. @mundiario
