¿Eres un verdadero gamer? Atento a estos consejos de salud

Gamer. / Zoom.com.br
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Problemas de visión, dolor de espalda y cuello y obesidad son algunos de los efectos negativos de pasar muchas horas frente al portátil o a la consola. ¿Eres un verdadero gamer? Esto es para ti.

¿Eres un verdadero gamer? Atento a estos consejos de salud

¿Eres un verdadero gamer? ¿No puedes despegarte de consola de videojuegos o portátil? Esto es para ti. La mayoría de la gente está al tanto sobre el hecho de que jugar videojuegos pueden tener ciertos beneficios para la salud: sirven como analgésicos, por ejemplo. También estimulan el desarrollo de la materia gris y de la creatividad. Sin embargo, como todo en exceso, también tiene sus consecuencias.

Retención de líquidos, problemas de visión, dolor de espalda y cuello, obesidad y contracturas, son algunos de los efectos negativos de pasar muchas horas frente al portátil o a la consola. Por ello, la mejor manera de combatir estos síntomas es tomar pequeños descansos periódicos y hacer cortos ejercicios de estiramiento. A continuación, te presentamos 3 de ellos para que los tengas en cuenta la próxima vez que decidas pasar horas jugando, recomendados por la entrenadora del GM Fitness Lab, Jesellys García.

1) Plancha: este primer ejercicio es bastante completo, ya que trabaja varios grupos musculares a la par, y sumamente sencillo. Al momento de hacerlo, procura que tus caderas no se eleven demasiado y que tu torso se mantenga siempre en línea recta. Puede resultar una eternidad, pero te será de gran ayuda, pues favorece la flexibilidad y fortalece el torso, reduciendo así los molestos dolores de espalda.

2) Estiramientos: es normal que se contraigan los músculos, especialmente los de las caderas, al pasar mucho tiempo sentado en una misma posición. SI quieres evitar este inconveniente, lo recomendable es hacer un stop para estirar. Para realizar este pequeño ejercicio, levántate y lleva tus manos a la cintura, junta tus piernas y empiézalas a mover una por una de un lado a otro, tal como un péndulo.

3) Postura de paloma: este ejercicio ayuda a endurecer –y al mismo tiempo estirar– los músculos de la espalda y el área cervical. Para esta postura arrodíllate, coloca una pierna doblada hacia delante y estira la otra hacia atrás, sitúa tus manos en el suelo a los lados del cuerpo hasta que poco a poco vayas colocando la ingle en el suelo.

Sumado a estos ejercicios, la entrenadora aconseja realizar cualquier actividad aeróbica, como andar en bicicleta, nadar, salir a pasear, entre otros. @mundiario

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